Tchouameni se instala en la duda
El pivote francés no acaba de arrancar, pero en el club no están preocupados: creen que es un asunto más de adaptación que otra cosa.
Tchouameni comenzó a mostrar todas sus virtudes en el encuentro de la cuarta jornada de Liga ante el Betis. Ese día dio un recital de todas sus virtudes futbolísticas, sobre todo a la hora de recuperar balones. Ese ha sido sin lugar a dudas su mejor partido con la camiseta blanca. Pero llegó el Mundial y… todo pareció desvanecerse: el comienzo de año fue malo. Cayó lesionado, perdiéndose la Supercopa. Durante su recuperación, y mientras su equipo se jugaba acceder a la siguiente ronda en la Copa ante el Villarreal se le vio en París atendiendo a un partido de la NBA, algo que enfadó a la afición blanca, pero en el que estuvo rápido y hábil para disculparse.
Pero en su regreso a los terrenos de juego no ha acabado de afianzarse como ancla. Hasta tal punto que Ancelotti prefiere a Kroos en esa demarcación. Un Kroos al que no le gustaba ser Casemiro, pero al que el técnico italiano le está obligando a jugar en ese puesto en diferentes encuentros, mientras Tchouameni parece pasar de puntillas en los encuentros en los que participa: ante el Chelsea apenas participó en 10 intervenciones…
En el seno del club creen que seguramente sea por la adaptación a un nuevo modelo de juego, un nuevo país, un nuevo equipo como es el Real Madrid, un club al que cuesta adaptarse como le pasó a Militao y al propio Modric en su llegada. Por ese motivo no ven ningún tipo de problema, sino que consideran que es más de adaptación que de otra cosa. Así recuerdan que al zaguero brasileño le ha costado bastante hasta que se ha convertido en un jerarca defensivo. Al croata le costaron algo más de seis meses hasta que rompió a jugar en un encuentro de Champions en Old Trafford: fue el autor de uno de los dos goles de los blancos ante el Manchester United, lo que le permitió continuar en la competición europea. Posteriormente se han convertido en piezas inamovibles del once titular de los diferentes entrenadores que han pasado por el banquillo del estadio Santiago Bernabéu.
Pese a fijarse en sus labores defensivas, el Madrid también lo contrató por su potencia en ataque, algo que además ha dejado de desear. No ha marcado aún con la camiseta blanca, cuando en el pasado Mundial anotó uno de los goles del torneo con un fuerte derechazo en el partido que enfrentaba a Francia y a Inglaterra. Algo en el que se asemeja a Casemiro, que solía anotar varios goles por temporada por su potencia, ya fuesen de cabeza o de potente tiro. La entidad blanca no escucha ninguna oferta por él. Saben que tarde o temprano, Tchouameni volverá a ser el jugador que deslumbró en el Girondins primero y en el Mónaco después. Pero por ahora sigue instalado en la duda…
