Otro golpe para Tchouameni
Camavinga le quitó el puesto en el Real Madrid y ahora... también en Francia. “En este parón, definitivamente, ha adelantado a Tchouameni”, firmó L’Équipe. Dinámicas opuestas.
Y es que el desplome de Tchouameni nació en Qatar. Donde
el propio Ancelotti señaló que había sufrido un enorme desgaste físico y
mental (tal vez fallar aquel penalti en la final hizo incluso más daño
del que ya se podía imaginar). “Poco a poco irá recuperando su mejor versión”, deslizó ante los medios. Una mano de confianza. Pero al final los hechos han acabado engullendo todo: Camavinga ya es titular por delante de Tchouameni en el Real Madrid. A los tres partidos del Mundial, Aurélien se lesionó (soleo de la pierna izquierda) y eso abrió la puerta a Camavinga, que se descubrió como un gran pivote. Y es que lleva 25 partidos seguidos jugando (desde la final del Mundial) y ha sido titular en 18 de los últimos 19 partidos de blanco.
Las puertas se tiran
No hay debate y donde aún lo había, ha ganado: Francia. Este parón abrió el dilema de quien era titular para Deschamps, porque su selección no usa un pivote, sino una dupla de dos medios (Rabiot es indiscutible y baila su acompañante). Tchouameni-Camavinga, Camavinga-Tchouameni. Dos jugadores y dos partidos, así que decisión salomónica: uno para cada uno. Jugó Tchouameni en la goleada a Países Bajos y apareció Camavinga en el partidazo de Dublín. El resultado del pulso es que Camavinga brilló más. “Asentó a Francia en campo rival, interceptó cualquier opción de contragolpe y, además, orientó una seguridad a su juego que fue un oasis en el desierto”, analizó AS.
Empieza una nueva era para Camavinga, que hasta la final del Mundial había transitado por un camino empedrado con Francia: debutó teniendo 17 años y tras apenas 50 minutos oficiales... volvió a la Sub-21. Se tomó la decisión de que le faltaba un escalón de madurez, que aún era pronto. Y despareció, hasta orillas del Mundial de Qatar, donde sólo jugó dos partidos: de lateral ante Túnez y 45 minutos en la final. Ahí se reivindicó, derrochando coraje en momentos de máxima tensión. Y de entonces, a este parón, cuando ha adelantado a Tchouameni. Cuando ha confirmado otro golpe para su compatriota: rebasado en el Real Madrid y también, con su país. No juega un partido completo desde las semis del Mundial de Clubes, hace ya 12 encuentros.