La Premier restringe la entrada de nuevos propietarios
El campeonato inglés ha puesto en marcha una serie de medidas encaminadas a proteger a los clubes de la competición.
Tampoco podrán hacerse con los clubes aquellas personas que hayan incurrido en corrupción, fraude, evasión de impuestos y crímenes de odio y se tendrá un mayor control sobre los problemas de insolvencia de los potenciales nuevos dueños, para evitar futuras bancarrotas y problemas financieros, como los que han afectado a más de 90 clubes desde la creación de la Premier en 1992.
Esta serie de medidas fueron impulsadas después del anuncio del proyecto de la Superliga en abril de 2021 y tras la compra del Newcastle United por parte de un fondo de inversión de Arabia Saudí, que fue ampliamente criticada por varios sectores de la opinión pública británica y mundial por los supuestos crímenes contra la humanidad cometidos por el país árabe.
Las decisiones que tome la Premier serán supervisadas por un organismo independiente, tal y como recomendó el Gobierno británico en la reforma del fútbol inglés presentada hace escasas semanas.