FIORENTINA 2 - MILAN 1 / La Champions distrae al Milan

Con el Tottenham en el horizonte, el equipo de Pioli cayó en Florencia gracias a los goles de Nico González y Luka Jović. Theo Hernández hizo el tanto de la honra.

As

Florencia se vistió de gala en una fecha especial tanto para Italia como para el fútbol mundial. El destino fue caprichoso y quiso que, justo el día que se cumplía el quinto aniversario del fallecimiento de David Astori, dos de sus antiguos clubes se viesen las caras entre sí. Canterano del Milan y eterno capitán de la Fiorentina, el Artemio Franchi rindió un nuevo y emotivo homenaje a uno de los suyos, tanto en los prolegómenos como en el minuto 13 de choque. Porque Italia, el país de la ciudad eterna, nunca olvida su pasado.

En lo meramente deportivo, el Milan buscaba recuperar la segunda plaza de la Serie A con las más que sensibles bajas de Krunic y Leao (ciclo de amarillas). Pioli apostó por De Ketelaere, la joya belga formó dupla ofensiva de inicio junto a Rebic y Giroud, mientras que la Fiorentina lució su once de gala, con Cabral e Ikoné como principales amenazas. Precisamente fue el francés quien forzó una falta en la frontal del área para que, Bonaventura con pierna derecha, mandase la primera declaración de intenciones a los rossoneri, con un potente disparo que obligó a Maignan a intervenir.

Fue tan solo el inicio de un acoso y derribo por parte del club viola ante un Milan incómodo, irreconocible y con la cabeza más en la vuelta de octavos de Champions ante el Tottenham que en la propia Florencia. Así, Maignan se ajustó los guantes y, con la ayuda de Tomori, mantuvieron con vida a los de Pioli en el partido. Primero, el guardameta francés con una gran estirada a un disparo lejano de Nico González y, minutos más tarde, con el defensa canadiense salvando sobre la línea de gol el tanto de Cabral.

Tres avisos fueron suficientes para hacer despertar a un Milan dormido. De la mano de De Ketelaere, los rossoneri dieron un paso al frente. Giroud, de volea y, Messias, con un remate forzado de cabeza forzaron a Terracciano a ponerse el mono de trabajo antes del descanso. Fue tan solo un espejismo, pues en la reanudación, Ikoné sacó a bailar a Tomori que cayó en la trampa del francés y provocó el penalti. Nico González, con pierna izquierda y desde los once metros, no perdonó ante Maignan e hizo justicia en el Artemio Franchi.

El gol viola sí hizo saltar las alarmas en un Milan que se lanzó con corazón y fútbol a por el empate. Pero Terracciano se vistió de héroe. Giroud, a la salida de un córner y, Theo Hernández, en el mano a mano, fueron incapaces de superar al cancerbero italiano que, con dos buenas intervenciones, sostuvo a la Fiore cuando más se tambaleaba. Pioli no lo veía claro y movió ficha hasta con un triple cambio. Ibrahimovic, Origi y Bakayoko al rescate, aunque no surgió el efecto deseado por los rossoneri.

La Fiore cerró filas, realizó un gran ejercicio de supervivencia y desbarató cualquier atisbo de ocasión ante un Milan que lo intentó sin éxito por tierra, mar y aire. Con los rossoneri lanzados a tumba abierta por el empate, Luka Jović que, apenas llevaba cinco minutos sobre el verde, puso tierra de por medio. Un centro medido de Dodo no lo desaprovechó el serbio para, con un cabezazo imparable, fusilar a Maignan.

Ya en el descuento, el Milan tiró de casta y Theo Hernández recortó distancias con un fuerte disparo, pero que no evitó un nuevo triunfo viola, el tercero consecutivo. El Milan naufragó en Florencia, perdió la oportunidad de recuperar la segunda plaza y, ahora ya sí, puede pensar en el Tottenham.