Pep Guardiola y compañía cierran la brecha con los líderes de la liga, el Arsenal, a solo tres puntos

Martín Blackburn, The Sun

Entonces, a las 10 p.m. del miércoles por la noche, el Manchester City podría estar en la cima de la tabla.

¿Y cuánta sangre herviría eso en la sede de la Premier League , así como entre los fanáticos de todo el país?


Pep Guardiola ha estado buscando una manera de dar vida a lo que ha sido una defensa del título poco convincente y farfullante durante gran parte de la campaña.

Bueno, los jefes de Prem bien pueden haberlo hecho por él, al abofetear a los campeones reinantes con 115 cargos de irregularidades financieras el lunes pasado por la mañana.

Si alguien en el Etihad no estaba dispuesto a presionar por el triplete esta vez la semana pasada, ciertamente lo está ahora.

La última vez que Aston Villa estuvo aquí, en el último día de la temporada pasada, el equipo local produjo una remontada impresionante para reclamar un cuarto título en cinco años.

¿Qué tan grande será esta victoria, y los eventos de la última semana, cuando el trofeo se entregue nuevamente a fines de mayo?

Si el City puede ganar el choque decisivo en el Emirates a finales de esta semana, entonces podría convertirse en la semana fundamental de toda la temporada.

¿Y cuán incómoda sería la presentación del trofeo en poco más de tres meses?

El tiempo lo dirá, por supuesto, pero los hombres de Guardiola se parecían mucho más a ellos mismos en una primera mitad eléctrica que los vio correr hacia una ventaja de tres goles.

No había duda antes del saque inicial de que los aficionados del City estaban dispuestos a hacerlo de nuevo: el ambiente en el Etihad era notablemente más animado que en las últimas semanas.

La única pregunta era si los jugadores de Guardiola se sentían de la misma manera, y uno sabía cuál sería la respuesta.

Y si no lo hiciste, los campeones tardaron menos de cinco minutos en deletrearlo.

Riyad Mahrez remató un córner desde la izquierda y Rodri escapó de su marcador para encontrar espacio en el primer poste.

Su cabezazo contundente fue demasiado fuerte para que Emi Martínez lo manejara y el equipo local tuvo el comienzo que quería.

Villa no ha sido fácil de convencer en las últimas semanas, particularmente en sus viajes donde ganó los últimos tres.

Pero los hombres de Unai Emery no eran rival para el City en este estado de ánimo.

El balón inteligente de Rodri envió a Ilkay Gundogan a la carrera, pero el tiro del capitán fue desviado por el poste por el ganador de la Copa del Mundo de Argentina.

Un balón cuadrado del alemán le habría dado a Erling Haaland una portería abierta.

Gundogan metió el balón en la red poco después, pero el máximo goleador de los Prem fue penalizado, quizás un poco duro, por un choque con Martínez en la preparación.

Sin embargo, las oportunidades siguieron llegando cuando un córner de Kevin De Bruyne fue lanzado a Jack Grealish en el segundo poste y su brillante volea fue tocada desviada por el brazo de Callum Chambers.

Un córner de Mahrez fue desviado en el camino de Haaland por Ramsey, pero el noruego empujó su esfuerzo por encima del larguero desde seis metros.

Grealish vio otro esfuerzo salvado por Martínez después de una excelente carrera y pase de De Bruyne, quien parecía tener un punto que demostrar después de quedarse fuera en Tottenham la semana pasada.

Kyle Walker le dio a Villa una rara oportunidad cuando su pase perdido aterrizó en los pies de Leon Bailey, pero Ruben Dias hizo una excelente entrada para negarlo.

Y ese resultó ser un momento clave ya que poco después el City duplicó su ventaja.

Chambers entró en pánico bajo la presión de Haaland cuando la pareja persiguió un pase de De Bruyne y su cabezazo dejó a Martínez en tierra de nadie.

El noruego se había ido demasiado desviado para ir a por el gol él mismo, así que inteligentemente cuadró para que Gundogan rematara en el segundo poste.

Y en el tiempo de descuento de la primera mitad, el juego terminó efectivamente como un concurso.

Ramsey se enredó con Grealish cuando el excapitán de Villa se le escapó en el área. Fue suave pero el árbitro Rob Jones dijo penalti.

La mayoría de la gente esperaba que Haaland lanzara el penalti, pero en lugar de eso fue Mahrez, que superó al experto en parar penales de la Copa del Mundo para convertirlo en tres.

Tanto Haaland como Dias se retiraron en el descanso, presumiblemente con un ojo puesto en el gran choque en el Emirates el miércoles.

A mediados de enero, la brecha entre el City y los líderes era de ocho puntos, pero eso podría haberse desvanecido el miércoles por la noche.

Sin embargo, el City todavía tenía trabajo por hacer aquí antes de que los pensamientos pudieran volverse hacia los Emiratos.

Bernardo Silva perdió la posesión por descuido en el medio del campo y Doulgas Luiz, una vez en los libros de City, jugó con Ollie Watkins.

Al exdelantero del Brentford le encanta jugar contra el City y terminó tranquilamente superando a Ederson para anotar contra ellos por sexta vez, y darle a su equipo un rayo de esperanza.

El City tuvo la oportunidad de terminar con una jugada de barrido que terminó con un centro de Grealish para el suplente Julián Álvarez, pero el suplente Ezri Konsa regresó para bloquear su cabezazo.

El suplente Phil Coutinho lanzó un tiro que fue desviado acrobáticamente por Ederson y su compañero suplente Jhon Duran golpeó el larguero con un sorprendente giro y volea.

Si uno de esos hubiera entrado, podría haber sido un final interesante, pero es seguro decir que el City está de regreso.


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