Durísimo informe sobre Saint-Denis: “Podrían haber muerto aficionados”
La UEFA solicitó un análisis independiente y hoy, tras ocho meses de trabajo, es público. Critica duramente a la Policía: “Utilizaron gases y armas sin justificación suficiente”
Es durísimo, muy crítico. Apunta, de hecho, que aquella noche “podrían haber muerto aficionados”. En líneas generales, señala a la Prefectura de Policía de París y la Federación Francesa, confirmando que la seguridad había quedado delegada hacia ellos -casi en su totalidad- por parte de la UEFA; pero sin eximir al organismo futbolístico. Ni mucho menos. De hecho, le cataloga como máximo responsable por ser, al fin y al cabo, el “propietario del evento”. Es decir, que la delegación de funciones no permite abstenerse de su revisión y control. “El informe concluye que la UEFA, como propietario del evento, tiene la responsabilidad principal por las fallos que casi conducen a un desastre”, reza.
Basta de culpar al público
Mucho, pero mucho énfasis en esto. Una de las teorías que circuló con más fuerza los días posteriores fue que muchos aficionados habían acudido sin entrada -o con falsas- y que eso había sido el principal foco del problema. Del caos y la congestión. Pues bien, el informe lo rechaza y condena: “No hay pruebas que respalden tales afirmaciones, hechas en un intento de eludir responsabilidades”. Si bien es cierto que agradece la cooperación de la Policía para redactar su texto (aseguran que, a posteriori, han colaborado en dar todas las pruebas posibles), se quedan con “una sensación de preocupación real por la falta de comprensión por lo que ocurrió (ausencia de autocrítica hoy en día) y haber adoptado una actitud de intentar culpar a los seguidores del Liverpool, sin pruebas. Una actitud censurable que ha involucrado a la UEFA, Uefa Events S.A. (su organizador de eventos), la Federación, Policía, funcionarios gubernamentales y hasta ministros franceses”.
Gases lacrimógenos y “pasividad” ante robos
La Policía de París, como se ha mentado, es la que queda más señalada. Primero, por no coordinarse con otras instituciones para prevenir o solucionar el “tapón” de una entrada; la más problemática. Pero, sobre todo, por utilizar “armas” como gases lacrimógenos o gas pimienta “sin justificación suficiente” y, para más inri, por su “pasividad” mientras numerables aficionados eran robados o atacados. El informe apunta textualmente: “El uso de gases lacrimógenos sólo empeoró las ya peligrosas situaciones que se estaban viviendo en la explanada alejada de los tornos. [...] Muchos seguidores de ambos clubes fueron atacados de regreso a sus casas y la Policía no los protegió”.
El texto comparó el suceso con la tragedia de Hillsborough (1989; una avalancha provocó la muerte de 97 aficionados). “Las acusaciones de que que muchos llegasen tarde y sin entrada fuese la causa principal o contribuyese a sumar peligrosidad fue, precisamente, una actitud muy similar a la que se adoptó tras Hillsborough. Unas acusaciones que persistieron durante décadas antes de ser refutadas”. Precisamente, señala que gracias a que múltiples aficionados del Liverpool tuvieron eso es su memoria, adquirieron rápidamente conciencia del peligro que se estaba rozando y se minimizó el riesgo de desastre.
Mentiras sobre el retraso
Asimismo, critican con contundencia las excusas que dio la UEFA para explicar el retraso del inicio del partido. Lo primero que se puso en el videomarcador es que el partido se retrasaba por la “llegada tardía” de los aficionados al estadio. El informe dice que esto es “manifiestamente inexacto” y fue un “craso error de juicio” usarlo. La segunda excusa que se dijo públicamente es que múltiples aficionados del Liverpool fueron con entradas falsas. El informe, además de señalar -como se ha apuntado antes- que no hay pruebas que respalden tales afirmaciones, revela que la UEFA apuntó a esto a petición de las autoridades francesas.
Sí, se devolverá el dinero
Próximamente, la UEFA anunciará un “plan especial de reembolso para los aficionados”. El texto, de 220 páginas, contiene hasta 21 recomendaciones para mejorar la seguridad en futuros eventos que el organismo futbolístico valorará con detenimiento. “En nombre de la UEFA, me gustaría pedir disculpas una vez más. En particular, a los seguidores del Liverpool, por la experiencia allí y por la incriminación, antes y durante el partido, que sufrieron al culparles injustamente. La UEFA se compromete a aprender y cooperará con los aficionados, clubes (Real Madrid y Liverpool), las federaciones anfitrionas y las autoridades locales, con el fin de ofrecer unas finales excepcionales en un entorno seguro y acogedor”, concluye Theodore Theodoridis, Secretario General de la UEFA.