Desvelan un plan de Rusia para absorber Bielorrusia
La organización de un oligarca ruso y opositor en el exilio desvela un proyecto ruso para dominar la política, economía, información y poder militar bielorruso para antes de 2030.
El documento, redactado por el Servicio de Espionaje Exterior, el Servicio Federal de Seguridad (FSB), la inteligencia militar (GUR) y el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Rusia, planea adaptar la ley bielorrusa a la de Rusia, gestionar la política exterior de Minsk, aumentar la presencia militar en el territorio de Bielorrusia, conseguir que el idioma ruso dominase y dar la ciudadanía rusa de los bielorrusos. Todos estos objetivos se marcaron para 2030.
Desde el comienzo de la guerra en Ucrania, Bielorrusia ha sido uno de los grandes avales de Moscú. Los presidentes de ambos países, Vladimir Putin y Aleksander Lukashenko, han evidenciado sus buenas relaciones, a pesar de que Bielorrusia ha intentado, sin mucho éxito, mostrar una posición de equilibrio entre Occidente y Rusia, al menos antes de la guerra. Sin embargo, Lukashenko ha mostrado su afinidad al Gobierno de Putin desde el primer día del conflicto, e incluso ha recibido sanciones de Occidente.
¿Cómo planea Rusia apoderarse de su país vecino?
El documento estudiado por el Dossier Center, Objetivos estratégicos de la Federación Rusa en la dirección de Bielorrusia, asegura que los objetivos del Kremlin son “establecer el dominio de la lengua rusa sobre la bielorrusa, ajustar la legislación bielorrusa a la rusa y subyugar la vida sociopolítica, comercial, científica y cultural de Bielorrusia”. Toda la estrategia se construye en torno a esos ámbitos, y cada uno de los objetivos se divide en períodos de urgencia, establecidos en los años 2022, 2025 y 2030.
Por ejemplo, para 2022, Rusia tenía que convencer a los líderes bielorrusos de la importancia de afianzar sus relaciones a través del Estado de Unión de la Federación Rusa y la República de Bielorrusia (SG), un plan de cooperación entre ambos países. Algunos expertos señalan que el plan “no es una unión de iguales, es una hoja de ruta para la absorción de Bielorrusia”, tal y como explica a Dossier Center Svetlana Tikhanovskaya, líder de la oposición bielorrusa.
Además, Rusia planea establecer el control en el sector político-militar de Bielorrusia para 2030. ¿Cómo? Limitando la influencia de las fuerzas “nacionalistas y prooccidentales”, completando la reforma de la Constitución de Bielorrusia, poniendo en valor los intereses de la Federación Rusa y fortaleciendo los sentimientos prorrusos en las élites militares y políticas, y también entre la población.
Rusia también planea controlar el contenido y flujo de la información de Bielorrusia antes de 2030 al aumentar “el número de medios rusos en Bielorrusia y fortaleciendo la influencia informativa rusa entre la población”; pero también introduciendo grupos de influencia prorrusos en los círculos de la élite política y militar y facilitando el pasaporte ruso a ciudadanos bielorrusos “para crear una capa de rusos interesados en la integración y los círculos comerciales centrados en el mercado ruso”.