CHAMPIONS | INTER 1 - PORTO 0 / Cuidado, ha vuelto Lukaku
El Inter batió al Porto gracias a un tanto del belga, que llevaba varios partidos dando señales positivas. El punta entró en la reanudación y fue decisivo.
Conceiçao,
como anunciaron en Portugal, finalmente pudo salir de inicio con los
recién recuperados Uribe y Otavio, alineando un once que saltó al campo
en San Siro muy agresivo y ordenado. Los portugueses decidieron dejarle
totalmente la iniciativa a sus rivales, que en el 13′ tuvieron el balón
que pudo cambiar la historia de la noche. Lautaro, olvidado por la
zaga rival, cabeceó fuera un buen centro de Dimarco, y poco después
Calhanoglu le dio trabajo a Diogo Costa con un disparo desde fuera del área.
Los
visitantes tuvieron un momento positivo antes del descanso,
desperdiciando una enorme oportunidad con Galeno, que cabeceó fuera ante
la portería tras un remate de Grujic parado por Onana. Poco después, la
tensión entre los conjuntos explotó cuando el Inter pidió un penalti por un contacto en el área con el mismo Galeno (que en Italia definieron enseguida muy claro)
y Otavio continuó la jugada en la otra mitad de campo, terminándola con
un cara a cara con Bastoni que involucró a ambos banquillos.
El central, luego, cabeceó un centro de Dimarco que Diogo Costa neutralizó con un impresionante reflejo.La reanudación comenzó con la lesión de Galeno, que llegaba tocado y fue sustituido por Evanilson, un disparo de Barella que rozó el poste y dos contragolpes de los Dragoes que hicieron temblar al Meazza. Onana salvó a los suyos en un mano a mano con Taremi y con una triple intervención ante el punta y Zaidu, jugada que terminó con un fuera de juego.El enorme susto fue el último para un Inter que acabó el encuentro tomando las riendas del juego. Uno de los momentos clave de la noche tuvo lugar en el 58′, cuando Inzaghi sustituyó a Dzeko (que acababa de discutir con su compañero Onana) con Lukaku.
El belga está creciendo, pudo salir de inicio y hoy dejó clarísimo que lo peor ha pasado para él. Tras la segunda amarilla a Otavio en el 78′, que tumbó de mala manera a Calhanoglu justo delante del árbitro, la presión interista aumentó con la superioridad numérica y tuvo premio en el 86′. Barella puso un centro para el punta belga, que cabeceó al poste y fue el más rápido en recuperar el balón para volver a intentarlo al primer toque con la zurda, abriendo la lata. Fue su cuarto gol en los 14 partidos de una temporada hasta ahora nefasta, y que hoy ha vivido su viraje. Si Lukaku vuelve a ser el de hace dos años, el Inter puede llegar lejos.