Brasil reportó que ya son 54 las víctimas fatales por las fuertes lluvias en San Pablo
Asimismo, las autoridades dieron cuenta de unas cuatro mil personas que fueron desalojadas de sus hogares, luego de que quedaran destruidas o porque se encuentran en zonas de riesgo
En tanto, son 4.066 las personas que se han visto obligadas a abandonar sus hogares porque éstos fueron destruidos o se encuentran en zonas riesgosas y que, de momento, se encuentran refugiadas en centros provistos por el Gobierno, iglesias, escuelas y gimnasios, distribuidos en seis ciudades.
Asimismo, para los próximos días se prevé que puedan llegar a la zona nuevas precipitaciones, que empeoren las condiciones de lo que se considera uno de los temporales más voluminosos que se han visto en la zona.
El Gobierno regional mencionó que los rescatistas continuan con la búsqueda de, al menos, una treintena de personas que aún permanecen desaparecidas en dos ciudades de la turística San Pablo, que fue azotada por el temporal justo cuando miles de personas se movilizaron hacia el país para disfrutar de las tradicionales fiestas de Carnaval.
Al momento, estas tareas se concentran en Sao Sebastiao y en la vecina ciudad de Ubatuba, donde se han registrado la mayoría de las víctimas fatales a raíz de los desplazamientos de tierra que le siguieron a las lluvias.
El litoral de San Pablo es una de las principales zonas turísticas del país y está rodeado de una cadena de sierras que, en las últimas décadas, fueron ocupadas irregularmente.
Para asistir en las tareas humanitarias, frente a las costas de Sao Sebastiao, ancló este jueves un portaaviones de la Marina que funciona como hospital flotante. Tiene capacidad para atender a 300 pacientes y cuenta con medio centenar de médicos a bordo, lo que permitirá descongestionar los centros de salud en tierra que están colapsados.
Por otro lado, el Gobierno federal dispuso la instalación de un “gabinete de crisis” en las zonas afectadas, luego de que el ministro de Integración, Waldez Góes, se reuniera con alcaldes de 12 ciudades del litoral paulista para analizar en detalle la situación en cada una y afinar, así, las medidas de emergencia ya adoptadas.
En diálogo con periodistas, Goes explicó, también, que este desastre se debe -en parte- a “una acumulación de problemas de vivienda, en un país que tiene a unas cuatro millones de personas que viven en zonas de riesgo”.
Igualmente, reconoció que también el episodio “se agrava con el fenómeno del cambio climático” y sumó que, de cara al futuro, una de las medidas que se adoptarán para prevenir nuevos episodios de este estilo será una “mudanza ordenada” de esas zonas de riesgo. Para ello, se implementarán los planes de vivienda popular que el Gobierno ya ha comenzado a desarrollar en otras partes del país.
Por último, agradeció el “enorme apoyo” del Gobierno federal y de la sociedad en general, que han movilizado sus recursos para enviar donaciones de miles de toneladas de alimentos, medicinas y ropa, así como los trabajadores que han facilitado el restablecimiento casi por completo del servicio de agua y las telecomunicaciones en todo el litoral.