BOLONIA 1-INTER DE MILÁN 0 / El Bolonia acerca el alirón del Nápoles

Los de Thiago Motta batieron al Inter gracias a un tanto de Orsolini en la reanudación, tras haber disputado una espectacular primera parte. Los de Spalletti marchan ahora con 18 puntos de ventaja.

Mirko Calemme

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La Champions le volvió a pasar factura a un Inter irreconocible, que cayó en Bolonia y le entregó el scudetto al Nápoles de manera casi definitiva. Con la derrota interista, la ventaja de los napolitanos sobre sus perseguidores sube a los 18 puntos, un récord que, a falta de 14 jornadas, convierte un alirón esperado bajo el Vesubio durante 33 años simplemente en una cuestión de tiempo.

Mientras los azzurri empiezan a preparar su fiesta, en Milán vuelven las preguntas sobre los altibajos de un equipo al que le cuesta mantener su rendimiento tras las citas de Champions: es la tercera vez en este curso que el Inter pierde justo después de haber jugado en Europa.

Tras la gran noche de Champions con el Oporto, Inzaghi había decidido volver a apostar por Lukaku de inicio, alineando al belga al lado de Lautaro. El comienzo del encuentro, no obstante, para los milaneses fue una pesadilla. Bajo la lluvia del Dall’Ara, el conjunto de Thiago Motta tenía otro ritmo, encerró al rival en su área y marcó un gol con un bonito remate de Barrow, anulado por un fuera de juego de Domínguez en la jugada (con los locales protestando también por una mano de Darmian poco antes del tanto). El Bolonia siguió apretando con un latigazo del lateral Camibaso y una rosca de Soriano, que golpeó el larguero. Tras estos sustos, el ritmo loco del principio empezó a tranquilizarse y el Inter dio señales de vida.

Mkhitaryan lo intentó desde lejos sin suerte y Lautaro estuvo muy cerca del 0-1 con un gran testarazo que terminó fuera, a pase de Gosens. El equipo nerazzurro empezó mejor la reanudación, con dos ocasiones para Calhanoglu, que chutó increíblemente fuera ante la portería vacía, y Lukaku, que golpeó a Skorupski, ambas creadas por iniciativas de Gosens. En su mejor momento, sin embargo, los milaneses encajaron el tanto de la derrota: D’Ambrosio y Barella le entregaron el balón a los locales y Orsolini ganó el mano a mano con Onana con un remate central, aunque muy potente. Quedaba un cuarto de hora, pero a la reacción del Inter le faltaron intensidad y puntería. Roma y Milan ya pueden alcanzar a los de Inzaghi, el Nápoles vuela cada vez más cerca del tercer scudetto.