Manita histórica al Milan

Momento negro para el campeón, que cayó 5-2 ante un Sassuolo en lucha por evitar el descenso. Los de Pioli suman tres derrotas seguidas y encajaron 17 goles en los últimos cinco partidos.

Mirko Calemme
As
Dijimos que el 4-0 sufrido con la Lazio fue, para el Milan, cerrar el círculo abierto con el 5-0 ante el Atalanta en 2019, una derrota de la que empezó el renacimiento hasta el scudetto. Sin embargo, lo peor todavía estaba por llegar, y lo hizo hoy. El Sassuolo, que apenas sumaba cinco puntos en las últimas 11 jornadas (y uno en las últimas cinco) le endosó a los de Pioli una manita histórica, que supone una de las peores derrotas en la historia del club, cuya última vez con cinco goles en contra en su estadio había sido en 1997. Además de ser un mazazo en la pelea por el scudetto (si el Nápoles hoy gana, su ventaja subirá a 15 puntos), este resultado hace peligrar los puestos de Champions para un campeón de Italia nunca tan en crisis. Desde que empezó el 2023, el equipo milanés está irreconocible. Tras la victoria con la Salernitana, llegaron un empate con la Roma (desperdiciando de mala manera un 2-0 en el marcador), la eliminación de Copa con un Torino en inferioridad numérica, un empate en Lecce (2-2), un 0-3 con el Inter en la Supercopa, un 0-4 en Roma con la Lazio y la manita de hoy.

Los 17 goles encajados en los últimos cinco compromisos oficiales certifican las dificultades de una zaga que, sin Maignan, ha perdido certezas, pero no todo se puede resumir allí. El Milan no está bien físicamente, le cuesta marcar goles, es frágil, no reacciona a los golpes. La tarde, no obstante, había empezado bien, con un golazo de Giroud al primer toque a pase de Theo, anulado por fuera de juego (que, a partir de esta jornada, en el Calcio es semiautomático). A partir de entonces, el Sassuolo hizo prácticamente lo que quería con el conjunto de Pioli, que hizo rotaciones y salió de inicio sin Leao. Modificar el once titular en un momento tan dramático pasó factura, ya que el equipo de Dionisi, en 20 minutos, ya había marcado dos goles, ambos gracias a las llegadas y las asistencias de Berardi, aprovechadas por Defrel y Frattesi. Un imperioso testarazo de Giroud ante un centro de Calabria ilusionó a San Siro con la remontada, pero Berardi reapareció justo antes del descanso y alargó la ventaja con un testarazo en un córner.

La reanudación empezó con un penalti de Laurienté, derribado en el área por Calabria, y otro gol anulado por fuera de juego, esta vez de Rebic. No hubo más reacción de los milanisti, que hasta encajaron el 1-5 con un disparo desde la frontal de Henrique, otra vez a pase de Berardi, y con una bonita rosca de Origi, al menos, recortaron distancias. Los hinchas, a pesar del humillante resultado, aplaudieron a un Milan herido, que todavía tiene muchísima temporada por delante. Dentro de una semana habrá otro derbi y allí Pioli no podrá fallar.

Nico González corta las alas del Lazio

Con un zurdazo desde la frontal del área, el argentino Nico González logró el empate del Fiorentina ante un Lazio (1-1) que se queda a las puertas de asaltar la segunda plaza de la tabla. El primer tiempo del Lazio fue otra vez muy bueno, exhibiendo personalidad y confianza a partes iguales. El tanto del italiano Nicolo Casale, en el minuto ocho, no hizo sino confirmar las buenas sensaciones y presentó el choque casi como un trámite para este Lazio que está en su mejor momento.

Sin embargo, con el resultado a favor, el Lazio empezó a ceder el balón a su rival y poco a poco dejándose arrastrar al ritmo que propuso el conjunto ‘Viola’. Tanto que, justo nada más comenzar el segundo acto, Nico González sacó a relucir su zurda y puso el empate con un gol para el recuerdo.

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