El PSG se derrumba
A un mes de la eliminatoria contra el Bayern, los parisinos se encuentran en un momento complicado. Ya han sumado dos derrotas en lo que llevamos de año.
En apenas 15 días de 2023, el actual líder de la Ligue 1 ya ha sufrido dos derrotas. La primera contra el Lens el 1 de enero y la segunda este domingo en Rennes. Ante un rival que le cedió la posesión, que le cerró los espacios continuamente y que le expuso en defensa, el PSG no tuvo antídoto para erradicar sus problemas. La dirección de campo de Galtier, además, no está siendo la mejor y los aficionados temen un déjà vu como ante el Real Madrid la temporada pasada.
El técnico, de 56 años, se escudó después de perder ante el Rennes en el Mundial. “Este grupo ha estado dispersado durante varios días y es difícil encontrar automatismos”, dijo. Las vueltas de Mbappé y Achraf Hakimi, que tuvieron diez días de vacaciones tras haber entrenado tres días después de la final del Mundial, tampoco surtieron efecto. El PSG fue un polvorín en Rennes. De aquel equipo que maravilló a principios de curso no queda ni un solo reducto.
Con y sin Mbappé
En el primer tiempo, el conjunto de la capital francesa no disparó a puerta. En el segundo, ya con Mbappé, apenas generó peligro. Donnarumma, como viene siendo habitual, fue el mejor jugador parisino sobre el verde. Apenas hubo velocidad con la posesión de balón y Galtier, que no es un técnico intervencionista, no encontró soluciones ante la superioridad del Rennes.
El irregular estado de forma del equipo se puede explicar, a su vez, con el mercado que hizo Luis Campos. Al Khelaïfi fichó al portugués por ser una figura paternalista de Mbappé en el Mónaco y el jugador, que llegó a hacer un amago de salir en octubre, es uno de los que menos satisfechos se encuentran con los fichajes. A excepción de Vitinha, que también ha bajado tras el Mundial, los Ekitike, Soler, Fabián Ruiz, Renato Sanches o Mukiele no están, de momento, cumpliendo las expectativas.
De la ‘MMN’, esa que no hacía prisioneros en agosto, el bajón ha sido evidente. A las vacaciones de Mbappé y la adaptación de Messi post-Mundial hay que añadir a Neymar. El brasileño no ha vuelto a su mejor nivel, siendo un jugador más lento, más errático y menos desequilibrante que el Ney que acumuló cifras estratosféricas durante los primeros tres meses de la temporada. Galtier deberá, en tiempo récord, encontrar la fórmula para reengancharlos antes de la eliminatoria contra el Bayern.
El PSG se juega la temporada contra los bávaros, pero tampoco puede descuidar la Ligue 1. Aunque poco importe lo que haga el club a nivel nacional, ya que lo que realmente importa está en Europa, el Lens está a tan solo tres puntos y el Marsella a cinco. En febrero, el actual líder del campeonato francés tendrá que visitar el campo del Mónaco y el 26 el Marsella en Le Classique. El próximo mes será trascendental, decisivo, imperial para el devenir de la temporada de un equipo acostumbrado a los sucesos sobrenaturales tanto deportiva como extradeportivamente.
Críticas feroces
“¿Nos damos cuenta de que Neymar, en cuanto a contratación y salario, es el mayor fracaso de la historia del fútbol?”, afirmó el periodista Daniel Riolo, refiriéndose al traspaso del brasileño en el verano de 2017, comprado por 222 millones de euros al Barcelona. “No se me ocurre un fracaso más grande por lo que costó, es horrible. Que haya estado bien en dos partidos de Final 8 en 2020 no significa que te vaya a salvar la vida. Que pare el PSG. Ahora estamos pensando en la idea de extender a Lionel Messi y Sergio Ramos...”.