El peligro de ‘quemar’ el medio

De Jong (2.524 minutos acumulados entre Barça y selección), Pedri (2.512′), Busquets (2.375′) y Gavi (2.286′) acumulan mucho desgaste cuando LaLiga apenas ha llegado a su ecuador.

Juan Jiménez
As
Salta la vista que Sergio Busquets, De Jong, Gavi y Pedri juegan siempre o casi siempre en el Barça. Y los números lo refuerzan. Cuando todavía no se ha llegado al ecuador de la Liga, el holandés ya ha acumulado 2.524 minutos entre club y selección. Muy cerca está e canario, con 2.512′. El capitán ha jugado 2.375 minutos y el de Los Palacios, 2.524′. La acumulación de esfuerzos de los cuatro centrocampistas titulares del Barça contrasta con la poca participación de Kessié (976 minutos), Sergi Roberto (893′) y Pablo Torre (303′). Los números, además, se radicalizan con la apuesta de Xavi por los cuatro centrocampistas. La gran pregunta es si los cuatro serán capaces de aguantar la temporada en ese ritmo de minutos. Jugadores como De Jong o Pedri ya han tenido problemas físicos esta temporada. Aguanta, impresionante sin lesiones, Busquets a sus 35 años. Y Gavi puede con todo, golpes en la cadera o en la entrepierna incluidos en la Supercopa. Pero hasta cuándo.

Se trata, pues, de que Xavi mida los esfuerzos de su centro del campo para que puedan llegar con aire, y no quemados, a final de temporada porque, además, Gavi, De Jong y Pedri tendrán los primeros compromisos de clasificación para la Eurocopa con sus selecciones. El Barça, además, tendrá un calendario cargadísimo si avanza en la Europa League. Podría tener pendiente aún 20 jornadas de Liga, nueve partidos se competición continental si llegase a la final; más tres de Copa, que se unirían a los 29 que ya ha jugado en todas las competiciones este curso. Los internacionales, además, tuvieron dos partidos de Nations y al menos cuatro de Mundial (De Jong uno más). Una temporada de unos 70 partidos.

Puede ser el momento de que jugadores como Kessié, Sergi Roberto o Pablo Torre den un paso adelante. Cada uno tiene una razón para hacerlo. El marfileño es un fichaje y viene de ser un jugador importante en el Milan. Ya ha tenido sus meses de adaptación y puede resultar clave para dar oxígeno a sus compañeros. Le falta juego a dos toques, pero tiene empuje y llegada y no se esconde en el campo. Sergi Roberto, por su parte, se sabe de memoria el libro de estilo de Gavi, es polivalente y, con Koundé asentado en el lateral, podría echar un cable en la zona de creación. Pablo Torre ha gustado en los pocos ratos que ha tenido. Marcó un golazo en Plzen, dio una asistencia contra el Intercity pero, sin embargo, sólo jugó medio tiempo en Ceuta y da la sensación de que Xavi cree que todavía está un poco tierno para la alta competición. Sin embargo, ha querido que esté a su lado este año para que termine de entender conceptos y redondee su formación

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