Newey teme otro truco como el de Brawn GP en 2023
El diseñador con más talento de la F1 cree que aún hay mucho margen en el desarrollo de los nuevos F1 y avisa de una posible aparición "como la del doble difusor, nadie la había visto"
MIGUEL SANZ, MarcaNo me atrevo a decir si nuestro camino es el mejor. Es muy posible que alguien más tenga una idea mejor a la vuelta de la esquina. Tal vez otro tiene un potencial de desarrollo mucho mayor pero aún está rezagado hoy
Pero para el último gran gurú de la F1, de 63 años, el escenario no es tan claro, teme que haya otro genio que encuentre algo que voltee su ventaja, porque el reglamento nuevo aún no está explotado a fondo en las distintas áreas del coche y tampoco hay dinero sin fin para contrarrestar la genialidad de algún rival.
"Al principio no me gustaron las nuevas normas, me parecían restrictivas, pero ahora creo que el chasis y el alerón delantero se mueven en un marco muy estrecho, pero también hay áreas con una sorprendente cantidad de libertad. Estas incluyen los pontones y la parte inferior de la carrocería", afirma el veterano diseñador inglés.
"Nosotros seguiremos desarrollando nuestro concepto porque lo conocemos mejor. Pero no me atrevo a decir si nuestro camino es el mejor. Es muy posible que alguien más tenga una idea mejor a la vuelta de la esquina. Tal vez otro tiene un potencial de desarrollo mucho mayor pero aún está rezagado hoy. Solo hay que acordarse del doble difusor. Esa laguna en la transición del suelo siempre estuvo ahí. Simplemente no se descubrió", asegura en referencia al truco que Ross Brawn se sacó de la manga en 2009 y fue determinante para ganar el Mundial desde un equipo desahuciado como era Honda en 2008.
Ya no tenemos tiempo para analizar cada concepto en detalle. Con un límite presupuestario ya no puede uno permitirse este lujo. Solo se copia lo que demuestra ser exitoso y duradero
Y que otros intentaron copiar sin lograr su efectividad. Eso también lo teme Newey porque "puedes innovar en alerones o suelo, pero todo solo funciona como un paquete. Un pontón de Ferrari no encajará en nuestra parte inferior de la carrocería y viceversa. Siempre hay una interacción entre estos elementos" asegura, antes de referirse al riesgo de Mercedes con aquellos pontones nuevos que estrenó en la primera carrera. Y al susto que pasaron por si funcionaba de maravilla y les daba ventaja.
"Mercedes fue una sorpresa, pasamos por alto esa laguna y luego ha mejorado cada vez más a lo largo del año. Pero para ser honestos, ya no tenemos tiempo para analizar el concepto en detalle. Con un límite presupuestario ya no puede uno permitirse este lujo. Por eso elegimos primero los caminos que creemos que traerán la mayor ganancia. Con el Mercedes o quien sea, se dará el caso de que todos encenderán la copiadora cuando el concepto de repente se convierta en un éxito duradero", asegura, definiendo a la perfección cómo puede arrancar 2023.
Así que hasta un tipo como Newey, que reconoce que sigue diseñando dormido, y aún tira de lápiz y reglas y no tanto de ordenador, tiene un punto de miedo. "Ninguno de nosotros sabe aún dónde terminará al desarrollar sus propios conceptos y nadie tiene por completo la razón. Al principio, con Ferrari, éramos dos equipos al mismo nivel y con pontones distintos, y hacia el final de la temporada, Mercedes se estaba volviendo más fuerte. Tienes la sensación de tiene que haber algo mejor".