Los bombardeos dejan sin electricidad a miles de ucranianos que la necesitan para sus dispositivos médicos de supervivencia
Los ataques contra infraestructuras civiles son considerados como crímenes de guerra que ponen en riesgo la vida de la población. Las bajas temperaturas del invierno que recién comienza generan aún más inconvenientes
Tal es el caso de Olena Isayenko, una paciente ucraniana entrevistada por CNN., que padece de insuficiencia respiratoria, por lo que necesita una máquina eléctrica de oxígeno para poder mantenerse viva.
Cuando suena la alarma que indica que su máquina se desconectó de la energía, es un sonimo mucho más aterrador para ella que el de las sirenas antiaéreas que anuncias bombardeos en la ciudad y que recientemente se escuchan con mayor frecuencia en Kiev.
Isayenko no puede respirar adecuadamente sin su máquina, por lo que debe recibir un flujo constante de oxígeno a través de un ventilador eléctrico para mantenerse con vida.
Los repetidos bombardeos rusos, durante la época invernal de la Navidad, contra la infraestructura eléctrica, han provocado que Isayenko se quede sin aliento en múltiples ocasiones durante los largos apagones.
Este caso es solo uno de los millones que se están viendo afectados día a día por los crímenes de guerra que Rusia está perpetrando contra Ucrania durante su caprichosa invasión.
Las cifras sobre los más de nueve millones de ciudadanos afectados fueron proporcionadas por el presidente del país, Volodimir Zelensky, en un mensaje publicado este lunes, en el que se refirió a los cortes de electricidad que sufren casi todas las regiones del país, en medio de las celebraciones de Navidad.
La situación de Isayenko, quien se mantiene concetada a través de unos tubos que van desde su nariz a su máquina respiradora portátil, le impide bajar desde el piso 15 del edificio en el que vive con su esposo, hacia el refugio antiaéreo cuando suenan las alarmas de los ataques, porque su condición respiratora no le permite bajar los pisos por las escaleras cuando cortan la luz y el ascenson deja de funcionar.
“Cuando no hay energía, esta máquina hace un pitido largo y me recuerda cuando estaba en cuidados intensivos, rodeada de muchas máquinas. Suena como una línea plana”, le dijo la mujer de 49 años a CNN.
“Cuando te sientas y esperas a que vuelva la energía en cualquier momento y no sucede, es frustrante”, dijo Isayenko entre lágimas.
Desde el 26 de diciembre “alrededor de 9 millones de personas están aisladas en diferentes regiones de Ucrania. Pero el número y la duración de los apagones está disminuyendo gradualmente. Estoy agradecido a todas y cada una de las personas que lograron” recuperar el servicio, dijo el mandatario, según las agencias ucranianas.
Zelensky agradeció a todos los trabajadores de servicios públicos que trabajaron en Nochebuena y el día de Navidad para restablecer el suministro de energía en diferentes partes del país.
Sin embargo la situación aún se mantiene inestable y se estima que continúe así durante todo el invierno que se extiende hasta el mes de marzo.
Otro caso registrado por CNN, es la de Lyudmyla Kaminska, quien enfrenta una batalla constante para mantener con vida a su nieto Sevastian, de 12 años.
El pequeño padece de fibrosis quística, un trastorno crónico que le produce acumulación de mucosidad en los pulmones, por lo que depende de tratamientos de nebulización para poder respirar adecuadamente.
Para poder aplicarse este tratamiento, requiere de una máquina eléctrica que se encarga de convertir sus medicamentos líquidos en un vapor que debe inhalar para respirar. Esta acción debe hacerla almenos ocho veces al día “de lo contrario, sus pulmones se bloquean y no podrá respirar. Es como asfixiarse bajo el agua”, dijo a CNN.
Para tratar de revertir situaciones como la de Kaminska, que están afectado a millones de ucranianos, el presidente Zelensky también explicó que los funcionarios gubernamentales del sector energético estaban tomando medidas para estabilizar la situación en el sector energético. Ucrania tenía una población de alrededor de 40 millones de habitantes antes de que se iniciará la invasión rusa, el pasado 24 de febrero.