Lo mejor de Mbappé está por venir
El delantero del PSG suma cinco de sus nueve goles en los Mundiales en eliminatorias y acostumbra a ser decisivo también en los cruces de Champions
Esta forma de repartir sus tantos confirma su tendencia con el PSG o el Mónaco. Mbappé es una máquina de hacer goles, pero se muestra especialmente fino cuando arrancan los octavos. Su mejor registro fue en la campaña 16.17, cuando aún era jugador del Mónaco. Con 19 años, anotó hasta seis tantos entre octavos y semifinales. Dos al City, tres al Dortmund y otro a la Juve que no le valió para alcanzar la final.
En la 17-18, Mbappé no marcó en eliminatorias, pero es que en su primer año en el PSG su equipo cayo en los octavos ante el Real Madrid. En la fase de grupos hizo cuatro goles. Al año siguiente ocurrió algo parecido puesto que el club parisino volvió a caer en octavos, esta vez ante el United. Su peor año llegó en la 19-20. Pese a alcanzar la final, no anotó en los cruces.
Sin embargo, Mbappé recuperó después su instinto en las eliminatorias. Kylian volvió a anotar seis goles entre los octavos y las semifinales. Su mejor actuación fue en el Camp Nou con un hat trick. Volvió a marcar a los azulgrana en París y en cuartos le hizo dos al Bayern en la ida en el Parque de los Príncipes. La temporada pasada volvió a caer en octavos tras la remontada del Real Madrid en el Bernabéu. Sin embargo, Kylian fue el autor del gol del triunfo en el Parque de los Príncipes en la ida, anotó el tanto de su equipo en Madrid y firmó otros dos ante Courtois que fueron anulados por un fuera de juego milimétrico. Si alguien había que rescatar del desastre parisino, ese era Mbpappé.
El Mundial es su competición
De lo que no cabe ninguna duda es que Mbappé disfruta sobre todo en las citas mundiales. Sus dos goles a la Argentina de Messi, más una asistencia, anunciaron lo que estaba por venir y lo que queda. Tras anotar en la final ante Croacia, se convirtió en el segundo jugador más joven en hacerlo por detrás de Pelé. Suma nada más y nada menos que nueve tantos ya en menos de dos Mundiales, cuando Messi suma los mismos y Cristiano siete en el quinto Mundial de ambos.
Su liderazgo y su influencia en la Francia de Deschamps es comparable con la de Messi en Argentina. El 10 de Francia y el de Argentina solo se cruzarían en una hipotética final.
