La derrota de Francia en la Copa del Mundo ante Túnez podría anularse ya que se revela que el árbitro violó las reglas
FRANCIA ha exigido a la FIFA que cambie el resultado de su último partido de grupo, porque Túnez comenzó antes de que se anulara su "empate".
Antoine Griezmann pensó que había rescatado un punto cuando disparó a puerta en el octavo minuto del tiempo de descuento.
Pero el gol fue anulado después de que el árbitro neozelandés Matthew Conger hiciera sonar el silbato final por una controvertida fuera de juego.
Griezmann retrocedía desde una posición de fuera de juego cuando Aurelien Tchouameni lanzó el balón al área de Túnez , aunque no disputó el balón.
El defensa tunecino Montassar Talbi luego se levantó para cabecear despejado solo para fallar en su intento y presentar el balón en bandeja para que Griezmann encontrara la red.
Desanimado Túnez luego inició para reiniciar el juego, con Conger haciendo sonar el silbato final aproximadamente un segundo después.
Fue entonces cuando el VAR qatarí Abdullah al-Marri le alertó sobre el posible fuera de juego, quien argumentó que Talbi no había jugado el balón "deliberadamente", lo que hizo que Griezmann fuera de juego.
Esa fue una decisión cuestionable en sí misma, ya que Talbi no estaba bajo presión, podría haber dejado que el balón se quedara fuera de juego y simplemente falló en su salto y cabezazo.
Sin embargo, Conger respaldó al VAR , que también intervino para ayudar a otorgar el penalti por el segundo gol de Portugal contra Uruguay, que se dio en una clara violación de las pautas de Ifab sobre lo que constituye una infracción de mano, para anular el gol.
Las regulaciones del VAR SÍ permiten que se cambien las decisiones después del pitido final: el Manchester United recibió un penalti ganador del partido en Brighton la temporada pasada en esas circunstancias.
Pero el reglamento establece, claramente, que una vez que el juego se ha reiniciado después de una detención, ninguna decisión puede revertirse.
Ese es el quid de la protesta francesa, y se entiende que los jefes de la FA están decididos a garantizar que la FIFA se doblegue y convierta oficialmente una derrota por 1-0 en un empate 1-1.
Tanto Conger como al-Marri ahora corren un grave riesgo de ser enviados a casa de la Copa del Mundo cuando se haga el corte de oficiales al final de la fase de grupos mañana.
Sin embargo, eso sería una vergüenza para los anfitriones, cuyo equipo fue eliminado después de dos partidos y cuya participación formal en la cancha en la Copa del Mundo concluiría con tal decisión.
