'Informe Mateu': un arbitraje notable, aunque debió mostrar más amarillas
Se considera que Lahoz no tuvo errores graves, aunque pudo expulsar a más de uno de cada equipo por las tánganas
JUAN CASTRO, MarcaLos árbitros suelen ver sus partidos al día siguiente y evalúan aciertos y fallos. El caso de Mateu Lahoz no fue menos y este sábado era el día indicado para evaluar resultados.
Su actuación, a tenor del criterio arbitral que se estila en FIFA, fue buena, si consideramos la parte técnica (penaltis, amarillas por juego brusco, faltas...), pero quizá la actuación no fue tan académica en el aspecto sancionador por la actitud, en tánganas y protestas, de uno y otro equipo.
Mateu, sin dudas, aplicó de forma pulcra el tiempo de descuento: 10 minutos, los mismos (estimativos) que se perdieron, como es habitual, desgraciadamente ya, en cualquier partido cuando el resultado es ajustado.
De esa misma forma, cabe interpretar que la opinión de la propia FIFA es satisfactoria, en líneas generales, de lo hecho en el campo, si bien también son conscientes de que si Mateu hubiera sido estricto con las amarillas (o rojas) en protestas y tumultos, se hubiera quedado solo en el campo. Ése fue, quizá, su mayor fallo, según algunas opiniones.
Pero aquí se lanza la pregunta. Si ya estaba caliente el partido, ¿se arregla con más tarjetas o era mejor un espíritu conciliador para intentar llegar al final 'vivos'? Y es que el fútbol cada vez está llegando a un nivel de protesta mayor que, más en un Mundial, es inaceptable.
Por tanto, la evaluación es que el viernes, en los 139' minutos de juego más penales, no hubo errores de bulto... y con ese mensaje positivo se debería quedar el mundo del fútbol, en general.
Dicho esto, lo que más molesta es la falta de valores de algunos jugadores que intentan, en su beneficio, poner el foco en el árbitro cuando sus carencias formativas no les impiden comportarse debidamente. Sobre las declaraciones de algunos jugadores, la tristeza invade a los árbitros, más que la rabia. Mateu, por ejemplo, arbitró en muchas ocasiones a Leo Messi, con un gran respeto mutuo.
El fútbol son valores, ésos que, a veces, y como concepto general, no de ese partido en particular, no se mantienen vigentes.