Benzema, una carrera entre sombras en la selección

El delantero del Real Madrid anunció en las redes sociales que deja la selección francesa. Solo pudo disputar un Mundial, el de 2014 en Brasil.

Andrés Onrubia

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Es difícil explicarle a un amante del fútbol que un jugador como Karim Benzema, leyenda del Real Madrid, uno de los mejores delanteros franceses de la historia, haya disputado únicamente un Mundial con 35 años. Y es todavía más complicado analizar cómo la selección francesa, prescindiendo de un talento de tal magnitud, haya llegado a las dos últimas finales del Mundial. El delantero, por si fuera poco, anunció su retiro internacional el día en el que cumplía 35 años, poniendo fin a una carrera con Les Bleus en la que tuvo más luces que sombras.

La última decepción de Benzema llegó precisamente en Qatar. Después de un inicio de temporada irregular en el Real Madrid, debido a las continuas lesiones que sufrió, el de Lyon llegó al Mundial con la esperanza de liderar a la campeona del mundo. Tras dos días en Doha, justo en el día en el que volvía a ejercitarse con el resto de sus compañeros, sufría una lesión en el cuádriceps que le dejaba sin opciones de jugar el mayor torneo de selecciones del mundo.

En un principio, la lesión pareció más grave de lo que fue. El abandono de la concentración de Benzema fue prematuro. Según informó L’Équipe, el atacante podría incluso haber llegado a los octavos de final. Deschamps, preservando la unidad del grupo, no quiso mantenerle y le mandó de vuelta a Francia desde el primer momento en el que se conoció el alcance de la lesión. La relación entre ambos se rompió. Realmente nunca había vuelto, pero el seleccionador tuvo que dar un paso ante la presión popular y convocarle para la Eurocopa de 2021.

Esa vuelta, inesperada en todos los sentidos, de Benzema a la selección no gustó a algunos compañeros, tal y como se informó en Francia recientemente. Griezmann perdió protagonismo, Giroud llegó a no ir a algunas convocatorias y los jóvenes siempre se mostraban abrumados de tener delante a un delantero de primerísimo nivel. Francia perdió contra Suiza en los octavos de final de la pasada Eurocopa y se generó un debate sobre si la vuelta de Karim fue beneficiosa para la selección. El delantero, no obstante, marcó cuatro goles, fue pichichi del torneo y después lideró a su selección en la Nations League que ganó contra España.

Su período en la selección ha tenido episodios de luces, pero sobre todo de sombras. En 2010, Raymond Domenech, seleccionador francés por aquel entonces, no le convocó para el Mundial de Sudáfrica. En 2014, ya con Deschamps, realizó una Copa del Mundo estelar, marcando tres goles, asumiendo el rol de líder del equipo y acabando el torneo como pichichi. En cuartos, ante Alemania, partido en el que Francia acabó eliminada, Benzema hizo un partido memorable, pero un omnipresente Neuer se encargó de aguarle la fiesta

Criticado por no cantar La Marsellesa, también por una crisis de goles en 2013 que ascendió a 1.200 minutos de sequía, Benzema vivió su peor episodio en 2015. El flamante ganador del Balón de Oro pasó una noche en el calabozo por estar implicado en un delito de tentativa de chantaje contra su compañero de selección Mathieu Valbuena. Noël Le Graet, presidente de la Federación Francesa de Fútbol, no titubeó ni un momento para apartarle. Fueron seis años sin Benzema en los cuales Francia llegó a la final de la Eurocopa en 2016 y ganó el Mundial de 2018. Su ausencia no parecía, a priori, ser un calvario para Deschamps.

Sin sentenciar firme y en pleno procedimiento judicial, el técnico, de 54 años, le daba una oportunidad con Francia. La decisión generó controversia y, aunque las estadísticas le dejaron en buen lugar, la eliminación en la Eurocopa ante Suiza dejó alguna grieta entre ambos que culminó en Qatar. Benzema deja la selección tras haber marcado 37 goles y otorgado 20 asistencias en 97 encuentros. Está en el top5 de máximos goleadores y asistentes, pero la sensación es que su periplo pudo ser mucho mejor de lo que dicen las estadísticas.