Toque de atención

Los tres últimos pinchazos llegan sin Benzema en el campo. Ante el Rayo, Ancelotti sólo salvó a Asensio: “El nivel de los otros fue más bajo del habitual”. La presencia del francés ante el Cádiz, complicada.

Fernando S. Tavero

As

Al Madrid se le están haciendo largas la cuesta a Qatar y la baja de Benzema. La temporada comenzó con sonrisas y viento a favor, fuera cual fuera el revés. Las primeras cuatro ausencias y media de Karim se solventaron con brío. Los tres goles al Celtic llegaron con el francés ya en el banquillo (se marchó lesionado a la media hora) y las victorias frente a Mallorca (4-1), Leipzig (2-0), Atleti (1-2) y Getafe (0-1), cuando estaba en la enfermería. Pero llegó la fatiga muscular a finales de octubre. Dos ramalazos salvaron el halo de ‘invencibilidad’ contra el Sevilla (3-1), pero los blancos ya presentaban una versión más terrenal. Desde ahí, cuatro partidos y solo uno con el Balón de Oro disponible, curiosamente la manita al Celtic (5-1). Los otros tres, pinchazos: en Leipzig (3-2), ante el Girona (1-1) y en Vallecas (3-2). Un aviso triple que también verbalizó Ancelotti. El problema, que el encuentro ante el Cádiz del jueves (21:30 horas) se complica para un Benzema que se ha ejercitado este martes en el interior de las instalaciones junto a Rüdiger. El alemán no llegará a tiempo; el francés, lo tiene muy complicado y desde el club hay pesimismo al respecto.

“A nivel de calidad hemos bajado un poco. Vinicius, Rodrygo que falló un par de remates que suele meter. Asensio estuvo bien, pero el nivel de los otros ha sido más bajo de lo habitual”, analizó Carletto en la flash interview. Para profundizar a posteriori en sala de prensa a nivel general: “Llegamos justos porque hemos jugado demasiados partidos. Está claro que cuesta. No estamos tan frescos como lo estábamos antes”. La realidad, la presión del Rayo asfixió a un Real Madrid que confirmó las sensaciones titubeantes de las últimas fechas. Dos tiros a puerta, los dos goles, en todo el partido y poca presencia ofensiva. Vinicius empezó bien (sacó una amarilla a Catena tras un eslalon marca de la casa), pero se perdió en una batalla de protestas. Rodrygo, ya lo indicó su entrenador, no estuvo acertado en los metros finales en situaciones donde no suele fallar. Y Valverde, sin Kroos de vuelta a la sala de máquinas, estuvo desconocido lejos del área. Los de Iraola dieron más pases -158 a 101- en el último tercio, donde se desata la tormenta, que los blancos, algo poco habitual. No hubo fútbol combinativo y nadie recogió la batuta. Y es que, el director de orquesta, Benzema, se está volviendo más y más imprescindible a medida que las fuerzas flaquean y el Mundial otea el horizonte.

“Cuando no tienes la actitud, la calidad no basta para ganar el partido”, apuntaba también Ancelotti tras el naufragio. Vinicius, Rodrygo y Valverde habían logrado mantener a flote el navío sin Karim (hasta Vallecas, había marcado el 54,3% de los goles del equipo, 25 de 46). Pero el resultado estaba por encima del rendimiento en muchos casos. Si bien Benzema no está teniendo el tino este curso que sí tenía en el anterior (lleva seis goles, uno cada 159′; por los 44 y uno cada 89′ del pasado), su mera presencia genera. El Madrid remata más (19,1 contra 15,5), tiene más posesión (58,9 % contra 57 %) y también ha marcado más goles (2.6 contra 2,1) con él sobre el campo. Lo goleador, además, adquiere importancia ante los problemas que surgen para mantener la portería a cero (solamente ante Elche y Getafe no han recibido gol en Liga). “Benzema no estará ante el Rayo, pero sí frente al Cádiz”, afirmaba el técnico blanco, abriendo un halo de esperanza que ahora se esfuma....

Agenda apretada

Todo apunta que el Balón de Oro no despedirá su gran año en el Madrid en los terrenos de juego antes de marcharse al Mundial. Ha disputado apenas 26 minutos en los últimos cinco partidos, en la segunda parte contra el Celtic. A priori, las sensaciones fueron buena, señaló Ancelotti, pero no ha vuelto a vestirse de corto... La acumulación de partidos para encajar el calendario está penalizando a un Madrid que arrancó el curso como un tiro, con la Supercopa de Europa y una racha victoriosa esplendorosa que se ha esfumado en este último esprint. Ancelotti ya reconoció que tendrían que dar vacaciones extra y realizar una puesta a punto para los futbolistas que se marchen a Qatar, consciente de la particularidad caprichosa de un Mundial en invierno. Además, no se buscarán refuerzos de emergencia. “Nuestra idea es clara: el mercado está cerrado”, sentenció el italiano contundente. De ahí que recuperar al Benzema constante sea crucial en la ruta hacia el Sextete.

Y Benzema, por su parte, tiene una agenda aún más apretada. Tuttosport le acaba de hacer entrega de su premio a mejor jugador del año que no pudo recoger en la ‘gala Golden Boy’, al igual que la AFE, donde tampoco pudo personarse el jugador por acompañar a su equipo ante el Rayo. Donde sí se le espera es en casa. Según informa RMC, el goleador realizará una visita exprés a Lyon, su ciudad, para ofrecer el Balón de Oro a su exequipo en el descanso del Lyon-Niza de la 15ª jornada de la Ligue 1. Si no hay contratiempo, en el Groupama Stadium tendrán a su ‘niño prodigio’ de vuelta durante unos minutos. También será el 35 aniversario de ‘Bad Gones’, el principal grupo de aficionados del equipo lionés que ya le dedicó una pancarta en la visita del Lille (victoria del Lyon por 1-0), felicitando a Karim por el áureo galardón. Veremos si la cuesta de enero viene acompañada de pendiente favorable y el exceso de kilómetros no pesa en las piernas de los mundialistas como Karim.