Mundial Qatar 2022. La historia de Breel Embolo, el suizo-camerunés que le anotó a su país de origen, donde todavía tiene familia y vacaciona
En la apertura del Grupo B, el seleccionado helvético derrotó a los africanos por 1-0 con un tanto del delantero nacido en Yaundé, quien no celebró
“Si marco un gol intentaré no celebrar. Pero el fútbol es un deporte de emociones. Si lo celebro no será contra mi país natal, sino porque quiero ganar. Es un partido muy, muy especial para mí y para toda mi familia. Porque es un poco como un conflicto. Habrá mucha emoción a lo largo de este duelo”, había advertido el delantero del Mónaco francés antes del partido en el estadio Al Janoub. El destino (y su olfato goleador) finalmente lo ubicaron ante ese desafío emocional. Tras un primer tiempo igualado, a los 2 minutos del segundo período venció al arquero camerunés (André Onana), con un remate de derecha tras un pase atrás de Xherdan Shaqiri. Con una mueca incómoda, Embolo extendió los brazos antes de levantar las manos en señal de disculpas mientras sus compañeros lo rodearon en el punto del penal. Primero señaló a los simpatizantes suizos que estaban ubicados detrás de donde había marcado y, después, a los cameruneses, ubicados en el otro extremo del estadio.
Cuando se realizó el sorteo de los grupos del Mundial, Embolo no se alegró demasiado... “No salté de alegría”, reconoció. “Pero a la vez estaba orgulloso de poder jugar contra mi otro país y enseñar lo que había aprendido”, añadió. Claro que ser verdugo de los “Leones Indomables” no estaba en sus planes.
Toenía 17 años y tdavía no contaba con la nacionalidad suiza cuando Camerún lo sondeó para jugar en ese seleccionado. “Tuve la posibilidad de ir al Mundial con Camerún en 2014, con el seleccionador Volker Finke”, contó Embolo. Pero finalmente no optó por esa oportunidad. “Nunca rompí el vínculo con Camerún y venía de disputar solo tres o cuatro partidos con el Basilea. Pensé mucho en esa decisión. Fue muy difícil. Y de repente, un día te despiertas, tienes tus respuestas y te dices: ‘Esto es lo que quiero. No hay vuelta atrás’. En mi familia había partidarios de las dos selecciones. Pero todos respetaron mi decisión de jugar en Suiza”, aportó el atacante de 25 años que también actuó en la Bundesliga, en el Schalke 04 y en el Borussia Mönchengladbach.
La sangre de Camerún, de todos modos, sigue corriendo por sus venas. “Toda mi familia vive allá. Para conservar este vínculo voy una o dos veces al año. Quiero que mis hijos también conserven estas raíces. Y también quiero retribuir a través de ciertas organizaciones benéficas”, expresó Embolo, que además suele viajar “a menudo de vacaciones a Yaundé y Duala”, donde recarga energías. “Mi padre todavía vive allá. Así que nos sumergimos por completo y me sienta muy bien cada viaje”, dijo, según AFP.
Embolo es un camerunés francófono que creció en la Suiza germanófona, habla perfectamente francés y alemán. Y esa característica lo acerca a más personas en Suiza. “Casi nadie, excepto la esquiadora Lara Gut-Behrami o Roger Federer entre los deportistas de primer nivel de Suiza, puede responder a todo el mundo en su idioma. Para ser una estrella del deporte a escala nacional es importante”, analizó Lionel Pittet, periodista del diario Le Temps.
Cuando Embolo tenía 16 años, su habitación estaba repleta de afiches de Mario Balotelli, Ronaldinho y de Samuel Eto’o. Otro personaje que también adornó su muro fue el rapero 50 Cent. Actualmente el delantero considera a Lionel Messi como el mejor jugador del mundo. Embolo tuvo una fulgurante aparición en primera división: debutó con el primer equipo de Basilea el 13 de marzo de 2014, con 17 años, al ingresar en el minuto 90 ante Red Bull Salzburg por Europa League (0-0). En su siguiente partido, el 16 de marzo, por la Super Liga suiza, ingresó en el minuto 85 y, dos minutos más tarde, anotó su primer gol como profesional, para cerrar la victoria 5-0 ante Aarau.
El centrodelantero suizo está sumamente agradecido al DT que, en 2014, confió en él para hacerlo debutar en Basilea. Esa persona es..., Murat Yakin, el actual entrenador de la selección helvética. El guiño del destino quiso que los dos se volvieran a encuentrar en el seleccionado siete años después.
Luego de que no festejara el gol ante Camerún, Embolo se convirtió, probablemente, en el primer jugador en no celebrar un gol en una Copa del Mundo por sus orígenes. Un caso recordado es el del francés Antoine Griezmann, que no gritó el gol que le anotó a Uruguay en los cuartos de final de Rusia 2018, aunque en ese caso fue por otro motivo. El zurdo no lo hizo por respeto a la amistad que tiene con muchos jugadores charrúas; el sudamericano es una suerte de su “segundo país”.
A pesar de que los amargó en el debut mundialista, el DT de Camerún, Rigobert Song, dijo estar orgulloso de Embolo, su “hermano pequeño”. Tras el partido, el técnico lo felicitó: “Nos conocemos, es mi hermano pequeño. Nos hablamos a menudo por teléfono y quería felicitarlo. Esto es un juego. Que estemos en equipos diferentes, no significa que no sigamos siendo hermanos. Me alegro por él y estoy orgulloso. Está con la selección suiza y me hubiera gustado que estuviera a mi lado, pero así es la vida”.