Las autoridades educativas uruguayas buscan eliminar las notas, los exámenes y la repetición automática en las escuelas
La iniciativa fue aprobada por la Administración Nacional de Educación Pública y deberá ser ratificada por el Consejo Directivo Central
En un principio no había acuerdo entre secundaria y UTU pero lograron encontrar un balance y la repetición solo se podría dar en los últimos años de los tramos (tercero y cuarto en el caso de secundaria y octavo y noveno en el caso de UTU). Además, no habría exámenes para aquellas personas que no cumplan con los objetivos planteados, informó El Observador.
En el caso de Primaria ya había consenso: la repetición solo se podría usar en segundo, cuarto y sexto de escuela. Además, tanto inspectores como la dirección habían acordado la eliminación de las calificaciones; solo habrían comentarios de los maestros cada dos meses y al finalizar el curso. En tanto, la repetición por faltas se anularía y pasaría a primar el buen desempeño del alumno por sobre la asistencia a clase.
Actualmente los alumnos deben tener más de 140 días de asistencia a clase para poder aprobar. Durante la pandemia esta normativa dejó de funcionar en la práctica.
Con esta reforma en la educación, el objetivo es enfocarse en los acompañamientos a aquellas personas que por algún motivo no asistan a clase o no consigan los resultados mínimos aceptables para aprobar.
En tanto, las reuniones de profesores bimestrales cambiarán su formato -a través del cual los profesores dicen en voz alta las notas de cada alumno- y será reemplazado por un espacio de coordinación y evaluación de los alumnos. Teniendo en cuenta que se eliminaría la repetición automática por faltas, estos encuentros servirán también para que los profesores expliquen por qué motivo un alumno debería repetir el curso. Las horas de coordinación docente estarían incluidas en la carga horaria de trabajo.
El presidente del Consejo Directivo Central (Codicen) de la ANEP, Robert Silva, publicó en redes sociales un documento que detalla la propuesta: “Seguimos adelante en la política de cambio curricular para la educación obligatoria. Algo necesario, algo que el país no contaba. ¡Gracias a todos los docentes y equipos que lo hicieron posible!”, escribió en Twitter.
El proyecto, liderado hasta ahora por la directora ejecutiva de Políticas Educativas de la ANEP, Adriana Aristimuño, pasará a la órbita del Codicen, en donde el oficialismo cuenta con mayoría.