Coches más aerodinámicos y menos contaminantes: así es la transición ecológica de la F1

Los aficionados al automovilismo asocian este deporte al rugido de los motores, el olor a gasolina y a goma de los neumáticos quemándose sobre el asfalto. Sin embargo, en una sociedad cada vez más preocupada por el medio ambiente y por la reducción de la huella de carbono, ahora está presente un nuevo modelo que consigue hacer frente al reto de la sostenibilidad sin renunciar a la emoción y al puro espectáculo que ofrece el 'Gran Circo'

Marca

Los avances tecnológicos en el mundo automovilístico confirman que se están dando pasos importantes para la preservación de nuestro planeta. Unas mejoras que han permitido el desarrollo de motores más eficientes y el uso de combustibles más sostenibles para demostrar que la Fórmula 1 puede ser un buen aliado para la protección medioambiental.


Un desafío por el que el Banco Santander lleva años trabajando en busca de soluciones que contribuyan a la transición hacia una economía verde sin perder de vista al presente y dando pequeños pasos para un futuro próspero y sostenible.

Una de las iniciativas más recientes ha sido su vuelta a la F1 como patrocinador de Ferrari. De hecho, la marca italiana tiene como objetivo alcanzar lo ya conseguido por Santander hace ahora dos años: ser neutro en emisiones de carbono en 2030 en todos los circuitos donde se disputan los Grandes Premios.

A través de este acuerdo la entidad ha puesto a disposición de la escudería de 'El Cavallino Rampante' una amplia gama de soluciones enfocadas al desarrollo de avances tecnológicos que contribuyen a la sostenibilidad del sector. Y en este sentido, pasos ya se han dado algunos. Así, a día de hoy, los coches de Fórmula 1 son las máquinas más veloces que se han fabricado desde que existiera esta competición hace más de 70 años y estos monoplazas hacen un consumo cada vez más sostenible en cada Gran Premio que disputan.

Y es que, la conciencia generada acerca de la existencia del calentamiento global y de la necesidad del reciclaje y ahorro de ciertos recursos, ha llevado a los fabricantes a adecuarse a ciertos aspectos. Sin ir más lejos ya se ha conseguido que los coches de F1 sean un 30% más eficientes en cuanto al consumo de combustible y cada vez están más cerca que el nuevo motor sea neutro en carbono presentando las primeras líneas de un plan básico que pretende neutralizar por completo las emisiones de CO2 en una década tanto dentro como fuera de la pista del 'Gran Circo'.

A lo largo de la historia, la Fórmula 1 ha estado a la cabeza de la evolución tecnológica y la innovación con avances importantes para el desarrollo de la industria automovilística: seguridad, aerodinámica, sistemas de recuperación de energía, de navegación... Con esta iniciativa y trabajando en estrecha colaboración de la mano de Formula One Management (FOM), responsable de la promoción del Campeonato del Mundo de F1, tanto Ferrari como Banco Santander tienen la oportunidad de impulsar el cambio hacia un modelo sostenible ayudando a reducir las emisiones de carbono de los motores de combustión actuales.

Ferrari y Santander forman un "equipo perfecto" que está dispuesto a teñir de verde esta industria y hacer la 'pole' en la lucha por preservar el medio ambiente. Porque cuanto más innoven juntos para encontrar nuevas tecnologías que contribuyan a descarbonizar el día a día de las personas, antes se alcanzará el objetivo de cero emisiones.

La meta está en la neutralidad de carbono y las cero emisiones

Un trabajo conjunto que quiere seguir la estela marcada por el que se ha hecho en la comunidad de Elmsbrook, convertida en un buen espejo en el que mirarse. Y es que, a 18 kilómetros al nordeste de Oxford se encuentra Bicester, una localidad británica de apenas 30.000 habitantes, en donde la vida es tranquila y, ahora, un poco más verde. Y lo es gracias a ElmsBrook, la primera EcoCiudad 100% sostenible que se levanta en Reino Unido.

Un pequeño paraíso sin contaminación donde se puede respirar aire fresco. Si uno pasea por sus cuidadas calles se puede encontrar con cerca de 400 casas eficientes (desde el punto de vista energético) que forman la primera comunidad que ha conseguido alcanzar las cero emisiones netas. Todos los edificios cuentan con paneles solares para aprovechar la energía del sol, los autobuses son eléctricos y la bicicleta es el principal medio de transporte en una apuesta por la movilidad sostenible.

El caso de Elmsbrook se ha convertido en un ejemplo para enfrentar un reto que nos ataña a todos: el cuidado del planeta. Un desafío por el que Santander lleva años trabajando en busca de soluciones que le ayuden a liderar la transición hacia una economía verde.

Entradas populares