Asensio cambia su destino
La fatiga del francés ha jugado a favor del mallorquín, cuyas dos titularidades en los últimos tres partidos le catapultan: ahora tiene opciones de seguir.
Los siete primeros partidos de la temporada, en los que Asensio sólo jugó dos ratos (literalmente, siete minutos ante el Celta, diez en Glasgow), escenificaron a la perfección el rol que el Madrid le tenía reservado después de que la ventana veraniega del mercado hubiera estado abierta de par en par para él. El cambio de representante, Horacio Gaggioli por Jorge Mendes, confirmaba las ganas de encontrar un buen destino lejos del Madrid para el futbolista, que finalmente, y por sorpresa, se negó a abandonar el club sin que, además, trascendiera públicamente oferta alguna para ficharle. El Madrid tampoco le ofreció la renovación.
Finalizar su contrato en el Madrid para encontrar luego un buen destino y también una buena prima de fichaje (al estilo Mbappé) era a esas alturas la hoja de ruta establecida. Y el ostracismo al que Ancelotti le condenó en el arranque, la respuesta del Real Madrid.
Fue la confianza de Luis Enrique en su calidad y su llamada en la lista ante Suiza y Portugal lo que cambió definitivamente la suerte de Asensio. Jugó, además, de titular ante Suiza en la posición de falso nueve. Asensio aprovechó el espaldarazo, se activó y el mensaje deslizado ahora desde la agencia de Mendes es que tiene intención de renovar. ¿Estrategia para facilitar su año o declaración de intenciones?
No hay un jugador que haya aportado más desde el banquillo que Asensio. En realidad, ha participado en 78 goles en sus 249 partidos con el Madrid desde 2016: 52 goles y 26 asistencias. La eterna promesa que nunca explotó, pero un buen complemento para el Madrid si accede a mantener su sueldo y no subirlo, requisito imprescindible que el club impone ahora para prolongarle...