Vinicius, coloso en el Coliseum
El Madrid lanza casi la mitad de sus ataques desde la banda del brasileño, su máximo goleador. Benzema descansa y Mayoral pone el morbo en Getafe (21:00).
A una semana del Clásico, y con un viaje a Varsovia para medirse al Shakhtar de por medio, todo apunta a una rotación en el Madrid, que en cualquier caso no será extrema. Primero, porque en Getafe hay traspiés recientes (derrota blanca por 1-0 el curso pasado sin Vinicius), y segundo, porque no hay demasiado donde elegir: están lesionados Lunin y Ceballos, con fatiga muscular Benzema y fuera de onda Hazard, Mariano, Odriozola y Vallejo. Así que Ancelotti tocará poco. Quizá Lucas Vázquez (que regresa tras lesión) por Carvajal y Rüdiger o Nacho por Alaba atrás. En el medio, no es descartable que descanse Kroos, que su plaza la ocupe Valverde y que se abra una posibilidad para Asensio, que solo ha disputado 73 minutos repartidos en seis partidos y no ha sido titular en ninguno de ellos. El año pasado estuvo en el once inicial en 23 de sus 42 encuentros. La regresión es más que notable.
Ataque brasileño
Junto a él se espera a Rodrygo y Vinicius, que suman once goles y siete asistencias, datos que revelan que ahora no hay jugadores más importantes en el equipo, especialmente el segundo. El Madrid lanza el 47% de sus ataques en la Liga por la izquierda frente al 28% por el centro y el 26% por la derecha. Vinicius ha acabado llevándose al equipo a su terreno desde su fútbol radical: nadie marca más, nadie lanza más ataques, nadie suma más regates y, a la vez, nadie pierde más balones ni falla más pases. Todo en él es de alto riesgo.
El Getafe está en el otro extremo, el de la austeridad. Es el equipo con menos posesión de Primera (39%), el que menos pases da por partido (333), el que menos emplea el regate y el que menos balones recupera. Su fuerte está en el balón parado y en su capacidad para minimizar las pérdidas. Con todo, no ha sido capaz de cerrar su portería. Solo el colista Elche ha encajado más goles. Esa asignatura también la tiene pendiente el Madrid, que en esta Liga no ha dejado a cero a ningún rival. Courtois, el año pasado, lo logró 16 veces en 36 partidos. “Ahí tenemos que estar más atentos, porque es una de las claves del equipo”, recordó ayer Ancelotti.
La hora de Milla
A Quique se le acumulan todos los contratiempos en el mediocampo. Faltarán, probablemente, los dos mediocentros principales, Arambarri y Maksimovic, y eso le da la oportunidad de estrenarse como titular a Luis Milla, uno de esos casos de explosión tardía. Pasó por las canteras de Majadahonda, Rayo y Atlético y recorrió luego un largo camino en el fútbol de segunda línea: Alcorcón, Guijuelo (donde sufrió una grave lesión), Fuenlabrada y Tenerife. En Primera debutó con casi 26 años, en el Granada de Diego Martínez. “Tuve la sensación de que llegué tarde. Pero lo hice dando los pasos que tenía que dar y con la madurez que debía tener”, aseguró en una entrevista con Efe. Este verano sufrió una lesión muscular que le impidió debutar hasta la sexta jornada. Y en su estreno, ante Osasuna, acabó expulsado.
El otro foco del partido estará en Borja Mayoral, que anduvo a prueba en el Madrid todo el verano y acabó aceptando un traspaso al Getafe. “Empezaba a pesarme la inestabilidad. Me apetecía asentarme después de tantas cesiones”, explicó entonces. Diabético desde los cuatro años, llegó al Madrid con 10, en edad prebenjamín, pese a que su hermano mayor estaba en la cantera del Atlético. Cuando debutó en el equipo blanco había marcado 22 goles en el juvenil C, 54 en el juvenil B, 61 en el juvenil A y 11 en el Castilla. Un matador que, como tantos otros (Portillo, Negredo, Soldado…), no encontraron estabilidad en el primer equipo: “Estar en la cantera no te lo garantiza. Ahí solo llegan los mejores”, dice. Así, pasó por cesiones a Wolfsburgo, Levante y Roma. En Italia metió 17 goles en su primera campaña. En la segunda Mourinho prefirió a los que fichó él. Al Getafe llegó en el pasado mercado de invierno, marcó seis tantos y convenció. Hoy jugará su cuarto partido ante el Madrid. Con el Levante ya le hizo un gol y también estuvo en el triunfo azulón del curso pasado en el Coliseum. El equipo de Ancelotti sabe lo que tiene enfrente.