Manchester City toma la cima de la Premier League con un impresionante tiro libre de Kevin De Bruyne
LA belleza de ser Pep Guardiola es cuando pierdes un ganador de un partido de clase mundial: puedes estar bastante seguro de que aparecerá otro para sacarte del apuro.
Privado de la sensación de gol torcido Erling Haaland , City luchó para romper la tenaz defensa de cinco hombres de Leicester.
Sin embargo, esa fue la señal para que Kevin De Bruyne le recordara al mundo que Haaland no es el único regalo de Dios que posee Guardiola.
Su sensacional tiro libre justo después del medio tiempo quebró la resistencia de los Foxes y sus corazones cuando el balón se elevó más allá de Danny Ward desde 25 yardas y golpeó el poste al entrar.
Ese sorprendente golpe llevó al City de regreso a la cima de la Premier League para aumentar la presión sobre el Arsenal antes de su partido contra Nottingham Forest en los Emiratos.
Hubo algunas malas noticias desgarradoras para todos los entrenadores de Fantasy Football en el país cuando se confirmó que Haaland no se había recuperado de su golpe en el pie y se perdería.
Esa sensación de decepción habría incluido a Brendan Rodgers, si el jefe de los Foxes hubiera sido totalmente sincero en la preparación de este juego, cuando afirmó que quería que sus jugadores se pusieran a prueba contra los mejores.
¡Rodgers logró mantener una cara seria e insistió en que preferiría enfrentarse a un lado de la Ciudad con Haaland en él!
Sin embargo, sospechas que al jefe del Leicester no le tomó tanto tiempo como a Guardiola superar la gran pérdida del City.
Los 22 goles de Haaland fueron más que los 11 titulares combinados del City esta temporada.
Desafortunadamente para Álvarez, Rodgers probablemente pasó su semana preparando su equipo para capear el huracán humano Haaland.
Colocó a sus Foxes en una formación ultra defensiva 5-4-1, que había funcionado tan bien en una impresionante victoria por 5-2 en el Etihad hace dos años.
Esta vez hubo más una mentalidad de asedio que ese sensacional acto de aplastar y agarrar, y al pobre Álvarez le exprimieron la vida cuando una sólida pared de ladrillo azul mantuvo a raya al City durante una primera mitad unilateral.
Los hombres de Guardiola anotaron 10 tiros contra los dos del equipo local, pero el Leicester, con un Wout Faes belga de ganga de £ 15 millones en el centro de todo, se mantuvo firme obstinadamente.
Ilkay Gundogan trató de atrapar a Danny Ward con un lindo cabezazo hacia atrás de un centro de Joao Cancelo dentro de los primeros 10 minutos.
Pero el internacional de Gales dio marcha atrás para agarrar con seguridad el balón debajo del travesaño.
Unos minutos más tarde despistó el cabezazo de Rodri tras un córner corto para marcar un hito impresionante cuando Ward completó seis horas sin encajar un gol.
A medida que crecían las frustraciones de City, De Bruyne envió una instantánea que se movía de par en par, Álvarez vio un tiro intermitente en carrera desviado por el brazo derecho de Ward.
De Bruyne luego produjo un impresionante movimiento hacia atrás en el aire para elegir a Bernardo Silva, cuyo tiro fue detenido por la pierna extendida de Ward.
¡El dominio del City fue tal que Jamie Vardy tardó 18 minutos en dar su primer toque!
Sin embargo, seis minutos después, el Leicester casi le arrebató la ventaja cuando Harvey Barnes dio por muerto al improvisado lateral derecho John Stones, pero Ederson desbarató hábilmente su tiro raso.
Leicester sobrevivió correctamente a una sanción de VAR cuando Jack Grealish, ¿quién más?, cayó en el área.
Pero Kiernan Dewsbury-Hall había logrado hacer contacto con el balón primero con su pie derecho extendido. Sin pluma.
En ese momento, Leicester había logrado nueve toques en el último tercio, ¡solo 100 menos que los visitantes de la ciudad!
Sin embargo, el lado de Rodgers llegó al descanso después de montar la tormenta, ¿o debería ser Stormzy?
La superestrella del rap más grande de Gran Bretaña observó la acción desde la grada principal, invitado por James Maddison de Leicester, quien había realizado una celebración de gol "Hide and Seek" en su honor contra los Wolves la semana pasada.
En ese momento, Guardiola debe haber temido que sus jugadores, negados la presencia de Haaland, nunca tendrían la oportunidad de desempolvar sus movimientos de celebración de gol.
Sin embargo, todo eso cambió cuatro minutos después del reinicio cuando la verdadera estrella del día, De Bruyne, se apoderó del escenario.
Grealish, que había estado recibiendo frenéticamente instrucciones de última hora de Guardiola en el túnel durante el medio tiempo, finalmente causó impacto cuando Papy Mendy, suplente de los Foxes, le cometió una falta innecesaria.
Fue un error costoso del pequeño mediocampista porque preparó al brillante belga para recordarnos que todo el City está lejos de ser una banda de un solo hombre.
Apuntó, 25 yardas hacia afuera y lanzó un sensacional tiro libre que pasó por encima de la pared de cuatro hombres de los Foxes y la pelota golpeó el interior del poste de Danny Ward, quien intentó valientemente pero no pudo acercarse a él.
De los jugadores que han marcado más de 50 goles en la Premier League, solo David Beckham (55 %) y Christian Eriksen (44 %) han anotado un mayor porcentaje de sus goles desde fuera del área que el 42 % de De Bruyne.
Ese golpe maravilloso lo convirtió en 25 golpes de largo alcance de sus 60 golpes Prem.
El City rara vez amenazó después de eso y Leicester sintió que aún podrían salvar un punto.
Pensaron que lo tenían solo cuatro minutos después de quedarse atrás, pero Ederson se lo negó.
Maddison entregó un córner preciso como un láser al borde del área y la volea de Youri Tielemans se dirigió hacia adentro hasta que el portero brasileño logró desviar con la punta de los dedos hacia la barra.
Rodgers envió a los delanteros Kelechi Iheanacho y Patson Daka por Vardy y sorprendió a la inclusión de Caglar Soyuncu cuando finalmente se fueron a la quiebra.
Hubo un par de sustos para el City cuando Timothy Castagne se encontró con otra entrega perfecta de Maddison, pero la pelota salió volando de su hombro y pasó por encima.
Ederson salvó a Daka y luego a Iheanacho antes de que el City casi se disparara en el pie en el tiempo de descuento.
John Stones trató de despejar un centro profundo al poste trasero, pero su cabezazo voló por la parte de atrás de la cabeza de Ruben Dias antes de volar desviado por poco, cuando el City casi concedió un extraño gol en propia meta del empate.
