La gran decisión de Messi
El Messi de este año es diferente. “El año pasado nunca terminé de arrancar y esta pretemporada ha sido fundamental. Este año tengo otra mentalidad y mucha ilusión”, confesaba. Y prueba de ello es que en trece partidos disputados este año ya suma ocho tantos. Un año donde además del Mundial tiene la difícil decisión de su futuro.
La ‘gran decisión’ llegará después de la cita en Qatar, pero no necesariamente de inmediato porque el argentino no escogerá equipo mientras el PSG esté jugándose la Champions League y lo normal es que se sepa bien entrado 2023, tal y como sucedió con Mbappé este mismo verano.
Ahora mismo Messi no puede valorar qué será de su futuro el año que viene por la sencilla razón de que no tiene ni una oferta sobre la mesa. Ni siquiera del PSG. El atacante sabe que el club parisino está elaborando un borrador de la primera oferta de renovación y que esta llegará al término del Mundial.
Sin contactos con el Barcelona
Por otra parte, desde el Barcelona se desliza en público y en privado la posibilidad de volver a ver a Messi de azulgrana, pero lo cierto es que ahora mismo no hay ni tan siquiera contactos entre ambas partes. La herida de la salida de Messi del Barça aún sangra y habrá que ver si cicatriza a tiempo para volver a ver Leo en el Barça como jugador. Desde el Barça no cierran la puerta a un movimiento de fichas para cerrar esa herida que se produjo el 5 de agosto de 2021 y para ello pedirían a Messi un ajuste en el salario, algo que no debería ser ningún problema ya que en su día lo asumió, pero hay otra condición que nunca sería asumible por el argentino: volver en un rol secundario.