Intervienen fiesta y borrachera en una Sala Constitucional de Potosí
“El Vocal hilvanaba las palabras con dificultad, trataba de parecer sobrio y fingir que se encontraba sin beber una sola gota de licor”, relató el periodista.
El despacho del Velásquez fue cerrado y no se permitió el ingreso de nadie. “No le voy a dejar pasar porque es mi despacho y voy a trabajar. No es mi casa, pero tengo mi privacidad que tengo dentro mi oficina”, le respondió al reportero.
Después de unas horas llegaron representantes del Consejo de la Magistratura y la Policía quienes tuvieron que romper una ventana para abrir la puerta. En su interior estaba una funcionaria que apenas podía pararse y otro que estaba durmiendo en el piso. En la mesa todavía estaba la torta, los vasos de plástico estaban por todo lado, pero la botella desapareció.
El numeral 12 del artículo 187 de la Ley del Órgano Judicial, la número 025, considera falta grave “utilizar inmuebles u oficinas del Órgano Judicial con fines distintos a las actividades de la administración de justicia o sus servicios conexos” mientras que el numeral 13 del 188 dice que es una falta gravísima y causal de destitución “la asistencia a su fuente laboral en estado de ebriedad o bajo el efecto de sustancias controladas”.
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