Halloween en el espacio: las 17 fotos más terroríficas tomadas por la NASA
La tradicional fiesta lúgubre no solamente se celebra en la Tierra. Constelaciones fantasmales y cúmulos globulares se “vistieron” de arañas, lobos o retratos de brujas. Incluso, nuestro sol se “disfrazó” como una calabaza tenebrosa
Con mejor tecnología y telescopios espaciales escudriñando el cosmos a diario, la NASA ha generado en los últimos años una serie de fotografías terroríficas ideales para repasar un día como hoy. Infobae recopiló 17 imágenes tenebrosas de objetos, cuerpos celestes y mantos estelares publicadas a lo largo los últimos años que infunden miedo y podrían salir perfectamente de un cuento de terror.
1- Mano fantasmal
Se trata del púlsar PSR B1509-58, una estrella de neutrones en rápida rotación y con su intenso campo magnético inclinado respecto al eje de rotación. PSR B1509-58 se encuentra a unos 17.000 años luz de nosotros, en la constelación austral de Circinus. Se trata de un púlsar relativamente joven ya que la luz de la supernova habría llegado a la Tierra hace solo 1700 años. Fue detectado por primera vez como fuente de satélite de rayos X Uhuru.
Esta estrella de neutrones de 20 kilómetros de diámetro gira sobre sí mismo siete veces por segundo, generando un viento de partículas cargadas muy intenso. En esta imagen de la energía eólica genera rayos X de la nebulosa. El bajo consumo de energía de rayos X son de color rojo, las energías intermedias son de color verde y las energías de alta en color azul.
2- Cabeza de bruja
IC 2118, también conocida como Cabeza de Bruja o NGC 1909, es una muy tenue nebulosa de reflexión o reflejo que se cree que es un antiguo remanente de una supernova o una nube de gas iluminada por la cercana supergigante azul Rigel, la estrella más brillante en la constelación de Orión. Está ubicada a unos 1000 años luz de la Tierra y brilla gracias a la estrella que se puede observar en la parte trasera.
Las nebulosas de reflexión son enormes nubes de polvo que reflejan la luz de varias estrellas cercanas y lo suficientemente brillante como para que el polvo que refleja. Cuando las estrellas son muy calientes, que causan la ionización de las nubes de gas, creando una nebulosa de emisión.
Las nebulosas de reflexión, generalmente azules, son nubes de polvo que reflejan la luz de una o varias estrellas cercanas. Este es el caso aquí Rigel que inunda su polvo luz de la radiación de la cabeza de la bruja. Las estrellas de las nebulosas de reflexión no son lo suficientemente calientes como para ionizar el gas que la compone, a diferencia de las nebulosas de emisión. La distinción entre estos dos tipos de nebulosas fue hecha por Edwin Hubble en 1922. Rigel es la séptima estrella más brillante en el cielo y se encuentra entre los años 650 y 950 la luz del Sol, es 55.000 veces más brillante que nuestra estrella y tiene un diámetro de cerca de 116 millones de kilómetros, que es 84 veces más grande que el sol.
3- Nebulosa del Cráneo
El imponente Very Large Telescope de la Agencia Espacial Europea, (ESO, por sus siglas en inglés) capturó una nueva vista espeluznante de la Nebulosa del Cráneo en 2020. La vista del telescopio destaca el contenido de hidrógeno (rojo) y oxígeno (azul claro) de la nebulosa.
4- Fantasma de Casiopea
Esta nebulosa, oficialmente conocida como IC 63 y ubicada a 550 años luz, está en la constelación de Casiopea. La apariencia espectral proviene de un velo de gas y polvo que la compone. La imagen fue captada por el Telescopio Espacial Hubble en el mes de agosto del año 2016.
Aunque se necesita de un gran instrumento para tener esta resolución en la imagen, la constelación de Casiopea puede observarse fácilmente durante las noches de otoño e invierno.
5-Garra tenebrosa
Parecen dedos de hollín extendiéndose en el espacio. Esta vista espeluznante y extremadamente polvorienta de los Pilares de la Creación fue capturada en las últimas semanas en luz infrarroja media por el Telescopio Espacial James Webb de la NASA. Siendo que esta conformación se encuentran dentro de la vasta Nebulosa del Águila, ubicada a unos 6500 años luz de la Tierra.
En la imagen, un “fantasma” acecha el peñasco en la parte inferior izquierda. También una forma parecida a la de una gárgola gruñe hacia el centro del marco y la cabeza de un caballo oscuro sale disparado del borde del segundo pilar. ¿El más espeluznante de todos? Las estrellas recién formadas adquieren la apariencia de ojos saltones e inyectados en sangre. Y en el fondo, el polvo baila como cortinas pesadas y antiguas que se cierran. El polvo en la imagen del Webb es como el amanecer. Es un ingrediente esencial para la formación de estrellas. Aunque envueltos, estos pilares están llenos de actividad. Las estrellas recién formadas se esconden dentro de estas cámaras de color gris oscuro, y otras, como rubíes rojos, han saltado a la vista. Con el tiempo, la imagen del infrarrojo medio de Webb permitirá a los investigadores explorar en profundidad el gas y el polvo de esta región y modelar con mayor precisión cómo se forman las estrellas a lo largo de millones de años.
Esta foto revela una nueva e inquietante visión de un paisaje familiar. Esta escena fue capturada por primera vez por el Telescopio Espacial Hubble de la NASA en 1995 y revisitada en 2014 , pero muchos otros observatorios, como el Telescopio Espacial Spitzer de la NASA, también han contemplado profundamente los Pilares de la Creación. Los astrónomos obtienen nueva información con cada observación. A través de su investigación en curso, construyen una comprensión más profunda de esta región de formación estelar.
6- Cara terrorífica
El Telescopio Hubble logró captar a la “Cara” de aspecto amenazante y aunque pareciera que nos observa directamente de una forma no muy amigable, se trata de una colisión entre dos galaxias. Lo que parece ser el contorno azulado en realidad es un anillo de estrellas.
El nombre del sistema es Arp-Madore 2026-424 y se ubica a 704 millones de luz de la Tierra. La imagen fue capturada el 19 de junio del año de 2019.
7- Un murciélago suelto
Aunque a simple vista puede ser un murciélago amenazante en el espacio, se trata de NGC 6995, conocida informalmente como la Nebulosa de Murciélagos y está ubicada a 1400 años luz de la Tierra.
8- Una araña peligrosa
La formación estelar con forma de araña es conocida entre los astrónomos como Nebulosa de la Viuda Negra, y está a 10.000 años luz de la Tierra en la constelación de Circinus.
9- Trajes de terror
El astronauta de la ESA, Alexander Gerst, tomó esta imagen como parte de una serie de fotos que muestran la Estación Espacial Internacional por la noche. Los trajes espaciales vacíos con fundas sobre los cascos parecen un buen comienzo para una película de terror al estilo de Alien.
10- Cara en Marte
La nave Viking 1 Orbiter de la NASA tomó la imagen original en 1976 de lo que parecía ser un rostro en el suelo de Marte. El Mars Global Surveyor de la NASA revisó la extraña formación en 2001. Una imagen de mayor resolución reveló que la cara era solo una forma natural del terreno.
Pero vista en la década del 70 creó la ilusión de que una civilización extraterrestre había esculpido un retrato para ser observado por otros seres, como los terrícolas.
11- Un alien saluda en Betelgeuse
Las supergigantes rojas son las estrellas más grandes del Universo. La supergigante roja Betelgeuse en la constelación de Orión, es la observación preferida, de los interferómetros debido a su diámetro aproximadamente 550 veces la del Sol, su proximidad, a 643 años luz y su luminosidad en infrarrojos. La imagen de un alien blanco en el medio de la supergigante hace poner nervioso a cualquier observador ocasional.
12- El lobo aullador
A unos 20.000 años luz de distancia de la Tierra podemos ver a un lobo aullando, aunque todavía no lo podemos escuchar. La imagen fue captada por la NASA en Westerlund 2, un cúmulo de estrellas jóvenes y masiva en nuestra Vía Láctea. Se halla en el Cuarto Cuadrante Galáctico, en la constelación de Carina
13- Calabaza resplandeciente
Nuestra propia estrella, el Sol, parece una “calabaza resplandeciente” de sonrisa maléfica que parecería ser una composición de algún programa de edición digital. Pero lo cierto es que es absolutamente real. La imagen fue captada por el telescopio espacial Solar Dynamics Observatory (SDO) de la NASA el 8 de octubre de 2014 por este preciso telescopio espacial.
14- Sol que ríe
Aunque puede parecer simpática y divertida, la imagen del Sol ‘sonriendo’ puede parecerle a muchos un poco terrorífica. En la imagen se pueden ver agujeros coronales formar unos ojos y una nariz que conforman una cara. Las manchas que forman los ojos y la boca sonriendo, son agujeros que se forman debido a los vientos solares que egresan de la estrella hacia el espacio, y se los conoce como “agujeros coronales”. Esta foto la tomó el satélite SDO, por sus siglas en inglés, que observa la dinámica del sol para saber de dónde sale su energía, para también a su vez poder pronosticar de la manera más exacta posible el clima del espacio para las misiones que realiza la NASA o inclusive el poder dañino de las tormentas solares sobre la Tierra.
15- ¿El ojo de Sauron?
Esto puede parecerse al Ojo de Sauron de “Señor de los Anillos”, pero en realidad es una imagen del Telescopio Espacial Hubble que muestra un planeta llamado Fomalhaut b orbitando una estrella. Se halla a 25 años luz de la Tierra, en la constelación Piscis Austrinus.
16- Reloj de arena tenebroso
Su nombre oficial es MyCn18 y se ubica a unos 8000 años de luz de distancia. La NASA revela que la nebulosa Reloj de Arena captada por el telescopio espacial Hubble, es una joven nebulosa planetaria en la constelación de Musca distante 8000 años luz de la Tierra. El nitrógeno ionizado se representa con las tonalidades rojizas, el hidrógeno de color verde y el oxígeno doblemente ionizado con el color azul. Expertos encontraron que la forma del reloj de arena se debe gracias a una expansión de viento que ocurre dentro de la nube y provoca que se vaya agrandando lentamente.
17- Asteroide calavera
Un objeto extraño y tenebroso nos visitó en 2015 y 2018′, sin riesgo para la Tierra. Se trata del cuerpo 2015 TB145, que tiene un tamaño de entre 625 y 700 metros, su periodo de rotación ronda las tres horas y, bajo determinadas condiciones de iluminación, su aspecto recuerda al de una calavera humana. El 31 de octubre de 2015 pasó el asteroide relativamente cerca de nosotros, a tan solo 486.000 km, es decir, 1.3 veces la distancia que nos separa de la Luna. El asteroide calavera podría ser en realidad un cometa extinto que ha perdido sus compuestos volátiles tras numerosos pasos alrededor del Sol. Gracias a las observaciones en el infrarrojo medio tomadas desde el telescopio VLT, los autores pudieron detectar la emisión térmica del objeto.