En la recta final de cara al ballotage, una encuesta recortó la ventaja de Lula Da Silva sobre Jair Bolsonaro
El sondeo realizado por AtlasIntel indica que el líder del Partido de los Trabajadores ganaría por menos de cinco puntos
En su primera encuesta desde la primera ronda electoral del 2 de octubre, AtlasIntel encontró que el 51,1% de los votantes estaba a favor de Lula y el 46,5% se inclina por Bolsonaro.
Excluyendo los indecisos y los votos nulos, Lula tiene un 52,4% de apoyo y Bolsonaro un 47,6%.
Durante la polarizada primera vuelta y con un total de nueve candidatos, el ex presidente Lula obtuvo el 48% de los votos frente al 43% de Bolsonaro, preparando el terreno para un ballotage sorpresivamente complejo el 30 de octubre.
“El panorama de este sondeo muestra una lucha más difícil para Lula de lo que parecía al principio, con una cierta ventaja que será difícil de superar”, manifestó Andrei Roman, director ejecutivo de AtlasIntel.
AtlasIntel fue una de varias encuestadoras criticadas por subestimar el apoyo a Bolsonaro en la primera vuelta, aunque estuvo más cerca que varias firmas de sondeos más tradicionales.
El presidente de Brasil necesita obtener 6 millones de votos adicionales para ganar la reelección, mientras que Lula requiere de 1,2 millones para ser elegido en lo que sería un tercer mandato del líder del Partido de los Trabajadores (PT), que ocupó el cargo entre 2003 y 2010.
AtlasIntel entrevistó a 4.500 votantes en todo el país que fueron seleccionados aleatoriamente a través de Internet, entre el 8 y el 12 de octubre. La encuesta tiene un margen de error de +-1 punto porcentual.
Mientras tanto, los dos candidatos siguen adelante con sus campañas. Este jueves Bolsonaro admitió que “exageró” con algunas declaraciones durante su gestión en la pandemia de covid-19 y pidió disculpas por ello.
“Creo que hice lo posible para ayudar en el combate a la covid y hubo, de mi parte, alguna exageración en algunas palabras. Pido disculpas, pero forma parte de la emoción”, declaró el mandatario en un encuentro con líderes religiosos en la ciudad de Recife (noreste).
Las polémicas declaraciones de Bolsonaro durante la pandemia han sido una de las principales armas utilizadas por su rival en las urnas, Lula da Silva, para desgastar la imagen del gobernante.
El jefe de Estado llegó a imitar a personas con falta de aire y afirmó que no era “sepulturero” al ser preguntado sobre el elevado número de muertos.
Lula da Silva, favorito para la segunda vuelta electoral, prometió este jueves “recuperar” las industrias naval y petrolera como grandes generadores de empleo en el país.
El líder del PT insistió en una breve rueda de prensa en Aracaju, capital del estado de Sergipe, que, si vuelve al poder, la “prioridad máxima” será “combatir el hambre”, que hoy afecta a unos 33 millones de brasileños.
Para ello, aseguró que impulsará un “conjunto de políticas” con la intención de “generar empleos inmediatamente”.
Hoy, el índice de desempleo en Brasil se ubica en el 8,9 %, lo equivale a casi 10 millones de personas en busca de trabajo.
