El régimen de Irán asesinó al menos 23 menores en el marco de las protestas
La ONU denuncia que los padres de las víctimas han sido presionados para declarar las muertes de sus hijos como suicidios
“El Comité está alarmado por el asesinato por parte de las fuerzas de seguridad de al menos 23 niños, incluido un niño de once años. Según informes fidedignos, a algunos niños les dispararon con munición, mientras que otros murieron a consecuencia de las palizas”, expresó el organismo en un comunicado.
Asimismo, informó de que muchas familias, pese al duelo, han sido presionadas para declarar las muertes de sus hijos como suicidios, forzando, por tanto, a realizar confesiones falsas. Debido a ello, el Comité ha instado a Teherán “a que cumpla con sus obligaciones internacionales de Derechos Humanos”.
En dicho comunicado también mostró su preocupación por informes verificados que registran detenciones y torturas de menores en escuelas junto a adultos. Así, le ha recordado a Irán su “obligación fundamental para proteger el derecho de los niños”.
“El anuncio hecho por el Ministerio de Educación el 12 de octubre de que los niños detenidos serían trasladados a centros psicológicos de corrección y educación para evitar que se conviertan en personajes antisociales y los numerosos informes de expulsiones de muchos estudiantes de secundaria como represalia también son motivo de preocupación”, expresó.
Finalmente, el Comité de los Derechos del Niño de la ONU sentenció que Irán debe respetar “los derechos de los niños a la libertad de expresión y manifestación pacífica”, al tiempo que debe cesar “el uso de la fuerza contra manifestaciones pacíficas”.
“Muchos niños, incluidas muchas niñas, protestan para dar a conocer sus opiniones sobre temas que les interesan. Su derecho a ser escuchado no debe ser sofocado por ningún nivel de fuerza”, agregó.
Por otro lado, al menos 40 organizaciones de Derechos Humanos, entre las que se encuentran Human Right Watch (HRW) y Amnistía Internacional (AI), han exigido una sesión especial en el seno del Consejo de Derechos Humanos de la ONU para tratar la “gravedad de los crímenes” cometidos en Irán.
“En ese período de sesiones, el Consejo debe establecer un mecanismo independiente con funciones de investigación, presentación de informes y rendición de cuentas para abordar los delitos más graves de Derecho Internacional y otras graves violaciones de derechos humanos cometidas en Irán, incluso en el contexto de sucesivas oleadas de represión de protestas”, explicaron en un comunicado conjunto.
Por ello, han pedido “la rendición de cuentas”. “El mecanismo debe tener el mandato y los recursos adecuados para recopilar y preservar pruebas, y compartirlas con tribunales y órganos administrativos nacionales, regionales e internacionales que puedan tener jurisdicción sobre delitos”.
“Se necesita urgentemente un mecanismo con tales funciones para complementar el mandato del relator especial de la ONU sobre la situación de los Derechos Humanos en Irán, dada la gravedad y escala de los crímenes cometidos con absoluta impunidad en el país”, dijeron.
De esta forma, se podrían juzgar “hechos emblemáticos de larga data” que tienen “persistente impunidad”, como las desapariciones forzadas y ejecuciones sumarias y arbitrarias de 1988 y las protestas de noviembre de 2019.