Gavi gana el cásting del centro del campo
El canterano, que sigue sin renovar, convence a Xavi y se afianza como el tercer centrocampista junto a Busquets y Pedri por delante de De Jong y Kessié.
Estadísticamente, los datos que resumen su participación en el encuentro son incontestables, pero más allá de los números, su influencia en el juego fue determinante a la vez que sorprendente para un jugador de su edad.
Empecemos por los números. Gavi fue, con 61 intervenciones el tercer jugador del Barcelona que más peso tuvo en el partido sólo por detrás de Araújo y Koundé. Para hacerse una idea, Pedri intervino la mitad que su compañero de línea (28 veces). También fue el mejor del partido en la precisión del pase con 40 acciones de éxito sobre 44 intentadas, un 90,9% de acierto. Pero es que además, sin balón también destacó. Recuperó siete balones (sólo superado por Busquets con 9) y cometió cinco faltas, las mismas que recibió.
Más allá de las estadísticas, cuando en la primera parte el Sevilla dominaba al equipo catalán, fue junto a Ter Stegen el que mantuvo a su equipo en el partido a base de recuperaciones, como la que originó el primer gol del Barça, y faltas.
Gavi se destaca en el cásting para ser el tercer centrocampista de Xavi, que tiene en Busquets y Pedri a dos piezas intocables. El joven internacional español inició el curso compitiendo por ese tercer sitio con De Jong y el recién llegado Kessié y, de momento, se impone por goleada. Ha sido titular en los cuatro partidos oficiales disputados hasta el momento.
Y todo ello sin haber firmado una renovación que durante un tiempo pareció estar en el alero. Las negociaciones entre su representante, Iván de la Peña, y el club no han sido fáciles. El jugador tenía muchos pretendientes que le mejoraban en mucho lo que podía ofrecerle el conjunto catalán. A finales de julio Mateu Alemany anunció que se había llegado a un acuerdo de renovación, pero que se ejecutaría cuando el futbolista fuera mayor de edad. El 5 de agosto Gavi cumplió 18 años, pero el acuerdo sigue por firmarse, probablemente a causa del límite salarial. Por eso, sigue llevando el dorsal 30, que le identifica como jugador del filial a la espalda. El 6 le espera.
