El atentado contra Cristina Kirchner hizo que Bolsonaro y Lula replanteen su seguridad durante la campaña presidencial en Brasil
El intento de asesinato a la vicepresidenta argentina por parte de un ciudadano brasileño preocupa a los principales candidatos y obligó a reevaluar su seguridad de cara al 2 de octubre
Fernández salió ilesa el jueves después de que un hombre de 35 años de origen brasileño disparara un arma cargada, a pocos centímetros de su cabeza, que no se disparó. La nacionalidad del tirador subrayó la creciente preocupación por la violencia política en el altamente polarizado Brasil en el período previo a sus elecciones.
“Esta violencia y odio político que han incitado algunas personas es una amenaza para la democracia en nuestra región”, dijo Luiz Inácio Lula da Silva, en lo que supuso una indirecta velada a su rival, el presidente Jair Bolsonaro.
Bolsonaro, un ex capitán del Ejército de extrema derecha, ha instado a sus seguidores a armarse antes de las elecciones o a arriesgarse a ser “esclavizados”. Los críticos dicen que sus ataques contra Lula, al que tacha de comunista corrupto, han contribuido a crear un ambiente tenso.
El mandatario, que suele hacer campaña con un chaleco antibalas, estuvo a punto de morir en 2018 cuando fue acuchillado en la campaña.
El intento de asesinato en Buenos Aires ha hecho que el equipo de campaña de Bolsonaro considere aumentar las medidas de seguridad cuando está en la carretera, dijo una fuente a la agencia Reuters.
“He enviado una nota, lo siento. Pero cuando me apuñalaron, hubo algunas personas que lo aplaudieron. Lo siento. La gente ya está tratando de culparme por este problema. Y el atacante allí, menos mal que no sabía manejar un arma, si lo hubiera hecho habría tenido éxito”, sostuvo por su parte Bolsonaro.
“Espero que se haga una investigación para ver si fue su idea o si alguien lo contrató para hacer esto”, agregó.
El equipo de Lula también se mostró preocupado por la situación en Argentina. “Tendremos que mirar de cerca este aumento de la violencia política en el país, que es alentado por el actual presidente”, dijo a Reuters Paulo Teixeira, uno de sus jefes de campaña.
“Mi sensación es que un brasileño que intenta matar a la vicepresidenta de Argentina es el resultado de esta violencia predicada por el actual presidente”, agregó.
En julio, un responsable del Partido de los Trabajadores de Lula fue asesinado por un partidario de Bolsonaro, y el expresidente también está haciendo campaña con un chaleco antibalas.