Exhibición de Kvara y festín en Verona

El Nápoles goleó al Hellas a domicilio y el georgiano se estrenó en la Serie A con una actuación espectacular: 1-5 en el Bentegodi.

Mirko Calemme
As
A pesar de un verano repleto de polémicas y de adioses, el Nápoles sigue muy vivo. Los azzurri se despidieron de Ospina, Koulibaly, Insigne, Mertens y, pronto, saludarán a Fabián (que hoy no fue convocado y espera al PSG), pero en Verona empezaron a mostrar su nueva cara, que promete muy bien.

Los de Spalletti le endosaron al Hellas una manita en su estadio con una actuación colectiva espectacular, en la que destacó el talento de Khvicha Kvaratskhelia. El extremo georgiano, recién fichado, confirmó todas las buenas sensaciones que dio en la pretemporada, mostrando rapidez, golpeo con ambos pies, fantasía y carácter.

Los sureños dominaron el enfrentamiento, que comenzó con un minuto de silencio para recordar a Claudio Garella, legendario guardameta campeón de Italia con ambos conjuntos, que falleció el viernes, justo tres días antes de ‘su’ partido’. Los napolitanos, después de un gran inicio, tuvieron la culpa de distraerse tras la primera pausa de hidratación y el Verona supo aprovecharlo. Lasagna empujó entre palos un córner peinado por Gunter en el 29′, aunque los sureños supieron remontar antes del descanso.

Kvara anotó su primer tanto en el Calcio cabeceando a la red un buen centro de Lozano y Osimhen, en el 48′, marcó el 2-1 tras un saque de esquina y un cabezazo de Di Lorenzo. El nigeriano celebró reaccionando con rabia ante los pitos racistas de parte de la afición local, una triste costumbre en el Bentegodi.

El Hellas dio la última señal de vida de su partido en el minuto 3 de la segunda parte, cuando Henry, con otro cabezazo, puso las tablas asistido por Faraoni. El tanto no desconcertó a los partenopei, que reanudaron su monólogo con un tanto de Zielinski (gracias a una genial asistencia de Kvara), una gran jugada personal de Lobotka y un disparo de Politano a pase de Osimhen, que completó la manita.

El Nápoles cerró el partido rozando el 1-6 varias veces (el de Ounas fue anulado por una falta de Zerbin), y en esta semana quiere seguir mejorando. En cuanto se cierre el adiós de Fabián, la idea es incorporar de inmediato a Ndombele, reforzar la portería con Keylor y la delantera (para la que mañana se hará oficial Gio Simeone), con Raspadori. Spalletti, con estos fichajes, tendría material para divertirse mucho...

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