Exequiel Zeballos sufrió una lesión por una dura patada y Boca se vuelve preocupado de Salta
El problema es en el tobillo derecho del Changuito, a quien le hicieron estudios antes de viajar y volverán a examinarlo este jueves en Buenos Aires; según la primera evaluación, el escenario más leve habla de un esguince; Milton Leyendeker, el hombre de Agropecuario que lo lastimó, pidió disculpas
Según la primera evaluación que hicieron los médicos del club de la Ribera, el escenario más leve sería el de un esguince, algo que lo marginaría de las canchas durante tres semanas. Aunque en los primeros minutos de hoy hubo trascendidos relacionados con una lesión mucho más grave, más vinculado con un tema óseo y/o ligamentario.
Aunque el club no emitió ningún parte médico oficial, pudo saberse que este jueves Zeballos será sometido a una resonancia en la zona ubicada detrás de la tibia, en la que se develará si es necesaria una intervención quirúrgica o la misma puede evitarse.
En diálogo con TyC Sports, Milton Leyendeker, el hombre que lesionó al Changuito, lamentó lo ocurrido. “No fue mi intención lesionarlo. Le pido disculpas públicas y espero que no tenga nada grave. Siempre juego al límite, pero esta es mi primera expulsión”, dijo.
El partido apenas comenzaba, afuera se vivía una fiesta y adentro la lógica tensión del equipo que se siente inferior, como Agropecuario, y el que tiene toda la responsabilidad por historia, como Boca. Sin embargo, todo se distorsionó enseguida, a los 5 minutos, cuando Exequiel Zeballos escapaba a toda velocidad por la punta izquierda y recibió una patada descalificadora de Leyendeker. El árbitro, Maximiliano Ramírez, llegó raudo a mostrarle la amarilla al defensor de Agropecuario, mientras futbolistas de ambos equipos se entreveraban en empujones e insultos. En el suelo, el juvenil de Boca se retorcía de dolor.
Pasados un tiempo, todos cayeron en la cuenta de la gravedad de lo que había ocurrido. A tal punto que, luego de varios minutos de atención del cuerpo médico de Boca, cuando Zeballos pudo ponerse en pie, Ramírez revió su decisión y expulsó a Leyendeker. Una decisión que, se presume, tomó por recomendación de alguno de sus asistentes -o del cuarto árbitro, Mariano Negrete- y al ver las consecuencias de la patada del defensor de los de Carlos Casares. Zeballos intentó caminar, pero entre lágrimas pidió ser reemplazado. Sebastián Villa ingresó por el extremo de 20 años, que se quedó en banco de suplentes llorando y con hielo en el tobillo derecho.
Poco antes del final del partido, el santiagueño fue trasladado a una clínica de Salta, en donde le realizaron estudios. Según el cuerpo médico de Boca que pudo observar a Zeballos, los primeros indicios indicaban que, como mínimo, es un esguince. En caso de confirmarse esa lesión, será baja por al menos tres semanas. De todas maneras, el foco de los estudios continuarán en Buenos Aires para descartar una lesión osea y/o ligamentaria.
Esta semana, Zeballos había tenido muy buenas noticias que confirmaban su gran presente en Boca. El Changuito, surgido de las divisiones inferiores del club de la Ribera, extendió su vínculo hasta diciembre de 2026. La firma del nuevo contrato se llevó a cabo en el Centro de Entrenamiento de Ezeiza y con la presencia de Marcelo Delgado, uno de los integrantes del Consejo de Fútbol. Además, le elevaron la cláusula de rescisión al punto tal de convertirla en la más alta de todo el fútbol argentino. Anteriormente, era de 15 millones de dólares, pero con esta nueva firma subió a 25 millones. De esta manera, se transformó en la cláusula de salida de mayor valor entre todos los jugadores de la Liga Profesional, junto con la de Robert Rojas, el defensor paraguayo de River Plate.