Cuáles son las 3 razones que se esconden detrás de los “masajes gatunos”
Algunos creen que son poco cariñosos o egoístas. Sin embargo, los felinos domésticos nos demuestran su afecto con sus acciones. En el Día Internacional del Gato, qué significa su “amasado”
Para los que desconocen la vida junto a los felinos domésticos, convivir con los gatos es un placer para aquellos que buscan la independencia de sus acompañantes animales. Aunque vale aclarar que no es indiferencia, sino autonomía. Se bañan solos, no requieren que se los “lleve de paseo” y hasta avisan a su modo cuando necesitan algo en particular, es por eso que su maullido está dirigido a los humanos.
Es importante aclarar, también, que al igual que las personas, los gatos tiene su propia personalidad. Algunos tienen mal carácter, otros son desconfiados y existe un gran grupo extremadamente cariñoso. Sin embargo, sin importar cuán “malhumorados” sean, lo cierto es que el “masaje gatuno”, es decir cuando abren completamente sus garras para cerrarlas mientras esconden sus garras, es la forma en que nos dicen cuánto nos quieren y se basan en tres simples razones.
El primer objetivo del “amasado” gatuno aparece ni bien nacieron, es decir que surge durante su periodo neonatal. En ese momento, se puede ver como los pequeños masajean a su madre mientras maman. Este accionar busca estimular la producción de calostro que, posteriormente, se convertirá en leche. Es más, este comportamiento que realizan los gatitos incentiva “nivel central la producción de leche materna”, según advirtieron en un artículo de Muy Interesante.
Ahora, cuando dejan la leche materna y son destetados, el masaje gatuno puede tener tres razones:
1. Confort: cuando los gatos están cómodos en un lugar, el masaje gatuno tiene lugar en ese mismo instante y es una suerte de demostración de “felicidad”. Pueden ser distintos muebles o bien nosotros mismos. Panza, brazo y piernas son los espacios más elegidos y amasados por nuestros felinos domésticos.
2. Descanso más confortable: antes de finalmente recostarse, los gatos suelen “ablandar” su lugar de descanso para hacerlo más mullido. Este comportamiento también podría describirse como instintivo, ya que los ancestros de los felinos salvajes lo realizaban para que la hierba donde se iban a recostar fuera más cómoda.
3. Territorio: la relación de los gatos con su territorio se realiza mediante distintas señales y una de ellas es la olfativa, la cual efectúan mediante feromonas. Al amasar estos espacios, nuestros felinos domésticos dejan su olor gracias a las glándulas que se encuentran en las almohadillas de sus patas.
Qué hacer ante un “masaje gatuno”
El primer paso es notar que se trata de un comportamiento que demuestra su cariño y que se siente confortable en ese lugar (que puede ser incluso la misma persona). Ahora, para que sea un momento de disfrute entre ambos (gato y humano) es recomendable mantener sus uñas cortas, ya que pueden haber rasguños o roturas en los muebles asociadas.
Asimismo, los expertos advierten que no se debe retar a los gatos bajo ningún concepto, ya que puede provocar que nuestros amigos gatunos nos vean como una amenaza y se tornen agresivos. Pero existe un punto más que se debe evitar a toda costa, la desungulación. Cuando un veterinario desungular a un gato le quita la última falange para remover las uñas. Para compararlo con los humanos, sería eliminar la última parte de nuestras manos, donde se encuentran las uñas.
Según advierten los expertos, además de ser considerada una “atrocidad”, esta cirugía puede provocar muchos problemas de comportamiento posteriores en los gatos. Es que entre ellos se comunican, además de otros modos, mediante el rascado. Incluso, con esta intervención también les quitamos habilidades vitales para los felinos, la posibilidad de trepar, de tapar sus desechos en las cajas de arena y hasta el rascado entre ellos, cuando así lo deciden.