Un ¿penal? no sancionado, las dudas por que sí se cobró, y un choque durísimo
Un presunto codazo y una mano en el área visitante fueron las situaciones de juego que dejaron lugar para el análisis
Se jugaban 47 minutos de la primera parte y había córner a favor de Racing. El centro de Tomás Chancalay fue a la zona del punto del penal y un rechazo de Emiliano Méndez, volante de Sarmiento quedó dentro del área. En una disputa por la pelota Franco Quintero sacó de cabeza, pero en el intento por cabecear extendió su brazo izquierdo y le dio un golpe en el rostro a Enzo Copetti. El atacante de Racing se tomó el rostro y cayó en el área.
La primera polémica en Junín
El árbitro del partido, Pablo Echavarría inmediatamente comenzó a tener comunicación con sus compañeros Nazareno Arasa y Diego Verlotta , ambos jueces a cargo del VAR. El juez principal, finalmente se apoyó directamente en sus colegas y sin la necesidad de ir a revisar la jugada decidió no cobrar penal y finalizar la primera parte, ante el enojo de los futbolistas del equipo visitante y también de Fernando Gago.
Luego, en el inicio del segundo tiempo, cuando apenas se jugaban 28 segundos, volvió a aparecer la polémica. El equipo de Fernando Gago regresó dormido a la cancha y Lisandro López le ganó con el cuerpo y con jerarquía la pelota a Facundo Mura. El ex Racing metió un centro al área y la pelota dio en la mano izquierda de Emiliano Insúa. Echavarría, sin dudar, pitó el penal para Sarmiento.
¿Estuvo bien cobrado el penal para Sarmiento?
Pero no fue inmediata la confirmación del fallo por parte de Echavarría. Luego de un diálogo con sus compañeros del VAR decidió dirigirse al monitor a ver la jugada. Pasaron casi cinco minutos para que, finalmente, se confirmó que había existido la mano de Insúa, aunque no estaba tan separada del cuerpo. Jonathan Torres ejecutó la pena máxima y estableció el 1 a 0 parcial para el Verde de Junín.
El empate de Racing llegó a los 29 de la segunda parte. Enzo Copetti cabeceó adentro del arco un gran centro de Gabriel Hauche para establecer el 1 a 1, pero todas las miradas se las llevó el arquero del equipo local, Sebastián Meza. El joven de 22 años se dio un durísimo impacto contra uno de los palos del arco, en el intento por tapar la pelota.
Meza se puso poner de pie, pero de su rostro salía muchísima sangre por lo que tuvo que ingresar el cuerpo médico del equipo local a atender al guardameta. A pesar del terrible golpe, Meza pudo continuar en el arco de Sarmiento disputando el partido hasta el final que terminó empate frente a La Academia.
