La samba sigue en Valdebebas
Vinicius, Rodrygo y Casemiro inician la pretemporada y mantienen la tradición de la presencia brasileña en el Real Madrid, que ha sido ininterrumpida desde el fichaje de Roberto Carlos en 1996.
El más veterano, Casemiro, encara una temporada en la que parte de nuevo como titular, pero en esta ocasión, por primera vez en mucho tiempo, cuenta con un recambio específico gracias al fichaje de Tchouameni. El inicio de una transición tranquila en el pivote. Sus otros tres compatriotas más jóvenes, Vinicius, Rodrygo y Militao, están ya asentados en el equipo inician una nueva etapa. Los tres firmarán en los próximos días su renovación con el club.
El que notará un mayor cambio respecto a hace un año es Vini, convertido en toda una estrella tras hacerse con la titularidad en el arranque de la temporada pasada, marcar 22 goles (y dar 16 asistencias) y ser el autor del tanto que, junto a las paradas de Courtois, dio al Madrid la Decimocuarta. Un ejemplo que quiere seguir Rodrygo, quien acabó ganándose la confianza de Ancelotti en el tramo final de temporada (sus goles fueron fundamentales en las eliminatorias de Champions contra Chelsea y Manchester City) y parte en una posición prioritaria para formar tridente de ataque junto a Vinicius y Benzema. Militao, consolidado como titular, estrenará pareja de baile en el eje de la zaga con la llegada de Rüdiger.
El club tendrá que buscar una nueva cesión a Reinier, ya que el cupo de extracomunitarios está cubierto mientras no avance los trámites para que Vinicius, Rodrygo y Militao obtengan la el pasaporte español. Una nacionalizaciones pendientes que, mientas se resuelven, también hacen tapón a Vinicius Tobias, la última incorporación brasileña de un Madrid que, pese a la marcha de Marcelo, mantiene una nutrida representación de la Verdeamarela.