Exdirector de la UIF revela que Murillo estaba envuelto en corrupción, pero nadie le creyó
El 20 de noviembre de 2019, poco después que Áñez asumiera la presidencia, Ramiro Rivas fue posesionado como director de la UIF, cargo del que fue destituido el 16 de octubre de 2020, pocos días antes de terminar la presidencia interina. En ese entonces, Rivas había denunciado que Arturo Murillo le había ordenado investigar a opositores, incluso a periodistas, y él se opuso; pero sí investigó al entonces ministro de Gobierno.
Tres años después de esos sucesos, reapareció y relató parte de ese episodio referido al exministro.
"Procedimos con una investigación reservada, a quien fuera el ministro Arturo Murillo por problemas de corrupción, por un hecho principalmente irregular de adquisición de armamento y equipo policial; idéntico a un caso del año 2002, porque eran idénticos actores como el Ministerio de Gobierno, un proveedor, (Luis) Berkman. O sea, lo mismo, compra de gases y demás", recordó.
Al enterarse que era objeto de investigación desde la UIF, Murillo mandó a intervenir la oficina y ordenó, al entonces ministro Planificación del Desarrollo, Branko Marinkovic, destituirlo. Ya fuera del cargo, Murillo pidió aprehender a Ramiro Rivas, sin que medie ninguna orden fiscal o de algún juez.
"Ese caso del señor Murillo me trajo muchos problemas, empezando por las amenazas de toda índole, hasta pretender, el 16 de octubre de 2020, capturarme, aprehenderme por instrucciones solamente del ministro en ejercicio, sin ninguna orden judicial ni requerimiento fiscal, pero no pudieron, tuvieron que salir por una tangente, como se dice. Entonces, fui perseguido en Bolivia", recordó.
En la actualidad, Rivas está dedicado a la actividad privada y optó por presentarse como uno de los 40 candidatos a Contralor General del Estado, cuya revisión de los documentos empezará este lunes, cuando los legisladores verifiquen los datos de los aspirantes.