“En un día tan malo solo hemos perdido cinco puntos”

La lucha entre Leclerc y Verstappen vuelve a protagonizar el campeonato. Max tira de calculadora con un Red Bull falto de ritmo en Austria.

Jesús Balseiro

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Sería un error reseñar que el primer enfrentamiento en pista entre Verstappen y Leclerc sucedió en Austria 2019, con triunfo de Max y polémica incluida (se tocaron, sin sanción para el holandés después de horas de revisión); porque llevan media vida peleando en los circuitos desde que se conocieron como imberbes pilotos de kárting. La rivalidad existe y no es sana, pero ambos se infunden respeto, mutuamente, y comparten un estilo agresivo. Protagonizaron vueltas de ensueño en Silverstone aquel año, pero hasta 2022 no habían peleado de nuevo por las posiciones de privilegio. Se persiguieron en Bahréin y Arabia Saudí, se cruzaron en Miami, y Red Bull Ring fue el pasado domingo el escenario del último duelo con triunfo claro de Charles, más allá de la victoria, porque pasó a Max tres veces en la misma carrera.

Sus peleas, duras pero limpias, contrastan con la versión más agresiva de Verstappen y Hamilton al final de la temporada pasada. Quizás tiene algo que ver la enorme ventaja del neerlandés por ahora en la clasificación del Mundial, 38 puntos. En cualquier caso, Leclerc no busca comparaciones: “Sobre la pelea entre Max y Lewis no puedo decir mucho, yo luchaba por posiciones menos interesantes el año pasado. Con Max me encanta, nos conocemos desde hace mucho tiempo, se puede discutir que este año está menos agresivo de lo normal, pero hemos crecido, nos conocemos muy bien, conocemos nuestras debilidades y hay mucho respeto, eso lo hace más emocionante”.

Calculadora

“Estuvo competido. Fue una buena pelea por parte de todos (incluía también su lucha con Hamilton a mitad de carrera). A veces estás con neumáticos diferentes, o más gastados, pero creo que estuvo todo bien. Este año, y este fin de semana también, los rebufos juegan otro papel en las frenadas. En general, fue una buena pelea”, dijo Verstappen al respecto. El neerlandés “esperaba que Ferrari fuera fuerte, pero no tan buenos” en el domingo de Austria. “Tenemos que analizar qué es lo que ha pasado, aunque en un día tan malo solo perdemos cinco puntos a lo largo del fin de semana (siete en carrera, menos uno de la vuelta rápida y otro del esprint)”.