Último tren a Qatar: Ucrania busca en Cardiff un bálsamo en tiempos de guerr
Juega con Gales desde las 13 y tendrá en su vestuario una bandera enviada por soldados que están en el frente de batalla
Habrá en juego un pasaje al Mundial de Qatar, que comenzará dentro de cinco meses. “Será un partido de supervivencia”, adelantó Oleksandr Zinchenko, jugador de Manchester City (Inglaterra), y una especie de vocero de la guerra en Ucrania. En sus últimas entrevistas, este lateral o mediocampista izquierdo se quebró al recordar la situación en su país. Pero sabe perfectamente que él es más útil dentro de la cancha que afuera. Al equipo ucraniano, que se preparó durante un mes para conseguir su boleto a Qatar, no le sobran futbolistas que militen en ligas de primer nivel. Con la competencia doméstica suspendida en forma indefinida por la guerra, ese grupo de foráneos (que también integran Ruslan Malinovskyi, Roman Yaremchuk, Andriy Yarmolenko y Vitaliy Mykolenko) es fundamental para darle un salto de calidad al equipo.
Ucrania jugará con el corazón. Y estará alentada por un grupo de 100 refugiados, invitados al estadio para la ocasión por la Federación Galesa de Fútbol. Rivales, no enemigos. Tanto, que cuando el seleccionado ucraniano puso pie en el aeropuerto de Cardiff tras vencer en Glasgow a Escocia fue recibida por un contingente local que le dio una calurosa bienvenida. Gales sabe que todo el mundo hinchará por su rival de este mediodía (el encuentro comenzará a las 13 y tendrá transmisión de ESPN), pero también es consciente de que se trata de una oportunidad única: hace 64 años que no juega un Mundial. Y en su única experiencia fue eliminado en cuartos de final por Brasil, que tenía a un adolescente de 17 años con futuro de crack: un tal Pelé.
“Vamos a ser el equipo más popular en el estadio y eso es lo principal”, zanjó Gareth Bale, uno de los mejores futbolistas galeses de la historia. El hombre también tiene una chance única de hacer realidad su sueño mundialista. Ganó todo con Real Madrid, el club del que se acaba de despedir. Su futuro no está decidido y confiesa que ha recibido “montones” de ofertas. Opta por concentrarse en su selección. “Entendemos todo lo que está pasando en Ucrania. Nuestros corazones están con los niños, las familias y el pueblo ucraniano. Todos nos hemos sentido muy mal durante este tiempo y no hemos podido hacer mucho. Pero este es un partido que queremos ganar”, sentenció. Dicho de otra manera: Gales no le hará un pasillo a Ucrania para que se quede con el pasaporte al Mundial. Más bien, todo lo contrario. Porque también quiere ir al emirato y compartir grupo con Estados Unidos, Irán e Inglaterra, que esperan por el cuarto integrante de la zona.
“Es un partido de fútbol y una competencia a la que queremos llegar. Todo el mundo simpatiza con Ucrania, pero este partido es un partido de fútbol. Es el deporte, une a todos. Comprendemos lo que significa para Ucrania, pero queremos ir al Mundial”, agregó Bale, para quien llegar a Qatar sería el broche de oro para una carrera gigante. “El partido será un evento pleno de emociones, donde mucha gente esperará buenas noticias para Ucrania, pero nosotros debemos intentar permanecer concentrados en el fútbol durante los 90 minutos”, dijo su compatriota Ben Davies, lateral izquierdo de Tottenham, de Inglaterra. El plantel galés también tiene un motivo emocional para sonreír: David Brooks volverá a acompañarlos. El jugador de Bournemouth (Inglaterra) superó un cáncer (linfoma de Hodking) y alentará a sus compañeros en el estadio. Será un partido a corazón abierto con el mejor premio posible: el último tren a Qatar.
Nations League: rejuvenece Italia e Inglaterra se complica
Luego de quedar eliminada de Qatar 2022 y de perder la Finalissima ante Argentina en Wembley, Italia necesitaba volver a creer. Para eso, el entrenador Roberto Mancini introdujo sangre nueva en el equipo azzurro: seis futbolistas tuvieron sus primeros minutos como internacionales y sólo el arquero Gianluigi Donnarumma mantuvo su puesto en la formación titular. El rival en Bologna por la primera fecha de la Nations League no era fácil: Alemania.
Sin embargo, gracias a la falta de puntería de los delanteros germanos y a la buena actuación de Donnarumma, Italia llegó a la última media hora de partido con chances de triunfo. Incluso se adelantó en el marcador gracias a un gol de Lorenzo Pellegrini, jugador de la Roma. Sin embargo, la endeblez defensiva de los azzurros regresó tres minutos después y Joshua Kimmich (Bayern Munich) igualó el partido. El 1-1 no se modificaría y Mancini lo dio por bueno: “Es una pena que hayamos concedido el empate justo después de nuestro gol. Hemos sido ingenuos”, dijo el entrenador italiano a Rai Sport. Y añadió: “Era la primera vez que estos futbolistas jugaban juntos. Han hecho un gran trabajo, han sufrido cuando tenían que hacerlo y han atacado cuando tenían que hacerlo”, elogió. Su colega alemán, Hansi Flick, se vuelve a casa con un invicto que ya llega a los diez partidos. Y es apenas el tercer entrenador del equipo germano que lo consigue.
El resumen de Italia - Alemania
Inglaterra, en cambio, se vuelve a Londres sin nada. Visitó Budapest y jugó ante Hungría en un estadio en el que sólo había niños y sus acompañantes: fue un castigo de la UEFA por cánticos racistas en la Euro del año pasado. Sin embargo, el equipo inglés perdió la pelota durante gran parte del encuentro y no estuvo a la altura del partido. Un penal cometido por Reece James (jugador de Chelsea) le permitió a Dominik Szoboszlai (Red Bull Leipzig) hacer historia: hacía 60 años que Hungría no derrotaba al combinado inglés.
El resumen de Hungría - Inglaterra