Ven maniobra legal para adjudicar planta de biodiésel a YPFB Refinación
La adjudicación directa a YPFB Refinación para la construcción de la planta de biodiésel por un monto de 387,5 millones de dólares se dio a partir de una “maniobra legal” que permitió beneficiar a la subsidiaria pese a no contar con la tecnología ni la experiencia para ejecutar el proyecto, opinó el analista en hidrocarburos Hugo del Granado.
Aunque Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) informó que la adjudicación directa a YPFB Refinación no vulnera ninguna norma ni representa irregularidad alguna, el especialista considera que hubo una maniobra legal que permitió forzar el proceso, pese a que en 2008 la estatal petrolera determinó no realizar adjudicaciones directas.
“Por ejemplo, se cambia o se complementa la razón social de la subsidiaria Refinación para que pueda operar, además de refinerías, en este tipo de plantas; o sea, desde todo punto de vista es irregular, aunque armen una estructura legal que sí justifique esto, pero está todo armado. Se trata de una adjudicación forzosa fabricada para operar así”, dijo Del Granado.
También observó que YPFB Refinación no tiene ninguna experiencia en la operación de plantas de biodiésel ni tampoco fue parte de este negocio, además que no tiene el "know how" (conjunto de conocimientos técnicos) como afirma el Gobierno nacional.
Del Granado también señaló que, si hubo tres licitaciones para la construcción de la planta que fueron declaradas desiertas, es “porque han debido hacer mal los pliegos de especificaciones”, puesto que existen empresas en distintas partes del mundo que poseen la tecnología y que con seguridad hubieran estado interesadas en el proyecto.
“Todas estas empresas obviamente que están interesadas en construir todas las plantas que pudieran construirse en el mundo, y por eso llama la atención que se haya declarado desiertas esas convocatorias”, dijo el especialista.
Otra irregularidad que observa Del Granado es el monto a invertir (387,5 millones de dólares), puesto que el proceso que lleva a cabo la planta de biodiésel es sencillo y no requiere de una tecnología monopolizada. Explicó que la labor de la planta consiste solamente en hidrogenar los aceites vegetales.
“No habría razón para que una planta de estas características, que es una planta simple, tenga semejante costo”, agregó.
En tanto, el analista en hidrocarburos José Padilla observó que, al margen del elevado monto que se destinó para la construcción de la planta, surge otro inconveniente: la materia prima. Según él, es necesario que el Gobierno otorgue un financiamiento al sector productivo para contar con la cantidad de soya que demandará la planta, pues solamente de ese modo se garantizará la materia prima.
Según Anapo, la producción de soya en la gestión 2021 fue de 3.273.000 toneladas.
“Por ejemplo, se cambia o se complementa la razón social de la subsidiaria Refinación para que pueda operar, además de refinerías, en este tipo de plantas; o sea, desde todo punto de vista es irregular, aunque armen una estructura legal que sí justifique esto, pero está todo armado. Se trata de una adjudicación forzosa fabricada para operar así”, dijo Del Granado.
También observó que YPFB Refinación no tiene ninguna experiencia en la operación de plantas de biodiésel ni tampoco fue parte de este negocio, además que no tiene el "know how" (conjunto de conocimientos técnicos) como afirma el Gobierno nacional.
Del Granado también señaló que, si hubo tres licitaciones para la construcción de la planta que fueron declaradas desiertas, es “porque han debido hacer mal los pliegos de especificaciones”, puesto que existen empresas en distintas partes del mundo que poseen la tecnología y que con seguridad hubieran estado interesadas en el proyecto.
“Todas estas empresas obviamente que están interesadas en construir todas las plantas que pudieran construirse en el mundo, y por eso llama la atención que se haya declarado desiertas esas convocatorias”, dijo el especialista.
Otra irregularidad que observa Del Granado es el monto a invertir (387,5 millones de dólares), puesto que el proceso que lleva a cabo la planta de biodiésel es sencillo y no requiere de una tecnología monopolizada. Explicó que la labor de la planta consiste solamente en hidrogenar los aceites vegetales.
“No habría razón para que una planta de estas características, que es una planta simple, tenga semejante costo”, agregó.
En tanto, el analista en hidrocarburos José Padilla observó que, al margen del elevado monto que se destinó para la construcción de la planta, surge otro inconveniente: la materia prima. Según él, es necesario que el Gobierno otorgue un financiamiento al sector productivo para contar con la cantidad de soya que demandará la planta, pues solamente de ese modo se garantizará la materia prima.
Según Anapo, la producción de soya en la gestión 2021 fue de 3.273.000 toneladas.
YPFB descarta irregularidades
A través de un comunicado, YPFB descartó irregularidades en la adjudicación de la planta de biodiésel subsidiria YPFB Refinación.
La estatal petrolera informó que el hecho no vulnera ninguna norma ni presenta irregularidad alguna, ya que se encuentra en apego al marco legal vigente establecido en el Reglamento de Contrataciones del Decreto Supremo 29506.
Dicha norma establece que, cuando dos convocatorias son declaradas desiertas, se puede convocar una contratación directa.
Además, el mismo reglamento indican que se puede contratar de manera directa a todas las empresas filiales y subsidiarias de YPFB.
