La salud de Putin: aseguran que se someterá a una operación por un cáncer y que podría entregar el poder
Los informes reportan que solo confía en Nikolai Patrushev, el secretario general del Consejo Nacional de Seguridad de Rusia y ex jefe del servicio de inteligencia
Estas impactantes afirmaciones fueron difundidas por el popular canal de Telegram General SVR, que dice tener una fuente bien situada en el Kremlin. Daily Mail, que se hace eco de esta información, recuerda que hace 18 meses, General SVR informó que Putin tiene cáncer abdominal y Parkinson.
Esta misma fuente asegura que Putin retrasó la intervención quirúrgica varios días pero que finalmente se someterá a la operación antes de la conmemoración del Día de la Victoria de la victoria rusa en la Segunda Guerra Mundial en la Plaza Roja, el 9 de mayo. “La operación estaba prevista para la segunda quincena de abril, pero se retrasó”, según SVR. “El presidente ruso Vladimir Putin padece una enfermedad oncológica y los últimos problemas identificados durante [su último] examen están asociados a esta enfermedad’, agregó.
El medio afirma que también padece “la enfermedad de Parkinson y el trastorno esquizoafectivo, que conlleva síntomas como alucinaciones”.
SVR detalló que Putin estaría dispuesto a poner un “encargado” para controlar a Rusia y la ofensiva en Ucrania. “Así que, mientras Putin es operado y recobra el conocimiento -probablemente dos o tres días-, el control real del país pasará solo a Patrushev”.
Esta medida sería ilegal -y sorprendente- ya que según la Constitución el poder debería pasar únicamente al primer ministro, Mikhail Mishustin. Este hombre de 56 años es un tecnócrata de bajo perfil, sin vínculos conocidos con el ejército o los servicios secretos.
En otro post, el medio informó: “Sabemos que Putin dejó claro a Patrushev que le considera casi la única persona de verdadera confianza”.
Es que el secretario general del Consejo Nacional de Seguridad de Rusia es el funcionario político más cercano al presidente ruso. El tenebroso Patrushev, de 70 años, es visto como un arquitecto clave de la estrategia dela invasión hasta ahora, y el hombre que convenció a Putin de que Kiev está plagado de neonazis.
El medio, que siempre cita altas fuentes del Kremlin, reveló también que Putin había comenzado a tomar “dosis fuertes” de medicamentos “recetados desde Occidente”. Según esa información, uno de los nuevos medicamentos provocó efectos secundarios - “fuertes mareos y debilidad”.
No bien comenzaron los efectos secundarios, el ruso interrumpió la medicación. “Y el médico que recomendó este medicamento ha sido retirado del proceso de tratamiento y está siendo investigado”, agregó SVR .
Además, detallaron, también se está analizando el propio fármaco, que fue importado “de un Estado no amigo”, como Moscú cataloga a las potencia occidentales.
Los primeros indicios
Los reportes sobre el agravamiento de la salud de Putin se han avivado en medio de su escasa presencia mediática durante el desarrollo de la invasión de las tropas rusas en Ucrania y lo que algunos especialistas consideran como señales evidentes detectadas durante sus escasas apariciones publicas.
A mediados del mes de abril el mandatario fue visto tratando de controlar un temblor en su mano derecha durante un encuentro con el dictador bielorruso, Alexander Lukashenko. Y el pasado fin de semana Putin fue visto fijando también su mano derecha al borde de una mesa, lo cual es considerado como un intento de ocultar los temblores que genera la enfermedad neurodegenerativa.
En el video, en el que el mandatario sostiene un encuentro con el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, también se aprecia lo que algunos especialistas consideran como el síntoma de las piernas inquietas, propio de la evolución del Parkinson.
El centro de Investigaciones Lansing documentó imágenes del presidente dando discursos que “lo muestran con el brazo derecho descansando casualmente sobre un atril, con el izquierdo recto a un lado”.
Según la investigación adelantada por el instituto, los síntomas visibles de la enfermedad indican que en este momento se encuentra en etapa tres. “La demencia progresiva es típica de la quinta etapa. La capacidad de moverse por sí mismo, generalmente perdida en la cuarta etapa, se conserva debido a la medicación excesiva, lo que probablemente afecta la salud mental del paciente”, señala el reporte.
En marzo de este año, un reporte de inteligencia de la agencia Five Eyes aseguró que los medicamentos contra el cáncer que toma Putin afectan su estado mental. Creen que su cara y cuello hinchados podrían ser un efecto secundario del uso prolongado de esteroides.
De acuerdo con la investigación del centro Lansing, el mandatario ruso ha sido tratado por varios médicos desde el año 2019. Incluso algunos de ellos lo han acompañado en sus viajes.
Lansing precisó que en la lista de especialistas figuran un oncólogo especializado en cáncer de tiroides, neurocirujanos, un especialista en lesiones de la médula espinal y un especialista en patologías de la columna vertebral, la médula espinal y tumores.
Sobre este último dato coincidió el Washington Examiner, medio que aseguró que el presidente ruso “recibió en secreto visitas de un médico especializado en cáncer de tiroides 35 veces durante cuatro años, y pasaron 166 días en presencia del otro”.
De acuerdo con una investigación adelantada por el medio ruso The Project y publicada el Washington Examiner, “Putin se sometió en secreto a una cirugía adicional el otoño pasado”. “No apareció en público durante todo el mes de septiembre. En los círculos médicos, se cree que el presidente se sometió a un procedimiento complicado relacionado con algún tipo de enfermedad de tiroides durante este período”, señala el informe del medio ruso que ha rastreado la atención médica que Putin.