Gimnasia ganó, pero no hubo fiesta: la tarde en la que no alcanzó con un muy buen triunfo sobre Newell’s
A pesar del contundente 3-1, el Lobo no logró meterse entre los ocho mejores por los triunfos de Defensa y Argentinos. Eric Ramírez y Ramón Sosa (2), los goles triperos
En el inicio del partido, Newell’s se llevó por delante a Gimnasia. Lo presionó, lo atacó y lo lastimó. Apenas dos minutos tardó en abrir el marcador: centro desde la derecha, buena descarga de Nicolás Castro y potente remate de Pérez para el 1-0. El Bosque, repleto, quedó en silencio. Ningún hincha se había imaginado un comienzo tan flojo del equipo de Néstor Gorosito.
Y la Lepra, con la ventaja, se agrandó. O el Lobo sintió el golpe y quedó aturdido. O un poco de cada una. Lo cierto es que en el primer cuarto de hora la visita dispuso de otras dos ocasiones claras. Muy claras. Pero Gimnasia lo tiene a Rodrigo Rey. El arquero tripero le tapó un mano a mano a Juan Manuel García y después le tapó otro similar a Juan Garro.
El conjunto local no le encontraba la vuelta al encuentro. Los de delante no gravitaban y los de abajo no ofrecían solidez. Hasta que a los 17 minutos apareció Brahian Alemán, el corazón del Lobo; el mediocampista habilitó a Ramón Sosa con un bochazo largo, el paraguayo mandó el centro desde la izquierda y Ramírez cabeceó para el 1-1. El Bosque, de repente, se convirtió en esperanza.
La segunda mitad de la etapa inicial fue de Gimnasia, que logró plantarse en campo rival y empezó a encontrar grietas en la última línea visitante. Pero Newell’s lo tiene a Iván Arboleda. El arquero de la Lepra sostuvo a su equipo hasta el entretiempo.
En el complemento la voracidad del Lobo resultó incontenible. Irrefrenable. Primero tuvo lugar el show de Sosa y después una exhibición colectiva. El paraguayo, cuando el segundo capítulo recién comenzaba, enganchó de izquierda a derecha y definió a un palo para el 2-1. El Bosque, de golpe, se transformó en estallido.
Y enseguida Sosa amplió la ventaja, quien la empujó en el segundo palo tras un excelente córner de Alemán. Era el 3-1 y también una enorme dosis de tranquilidad. La expulsión de Pérez, unos minutos después, le facilitó el trámite todavía más a Gimnasia.
El Lobo, a pesar de no haber clasificado, sumó tres puntos importantes para el objetivo que se propuso en este 2022: clasificar a una copa internacional. El cierre de torneo, además, demuestra la evolución del equipo de Gorosito: ganó seis de las últimas siete fechas. El recorrido de Newell’s en esta Copa de la Liga fue casi inverso: sumó uno de los nueve puntos finales del certamen y esa baja cosecha lo dejó fuera de la definición.
En La Plata hubo un gran partido y un claro ganador. Lo que no hubo fueron festejos. Cuando todo concluyó, a Gorosito le tocó contarles a los jugadores que el sueño se terminaba allí.