El Liverpool, tensión competitiva hasta la final
A los de Anfield les quedan cinco encuentros. Tienen puesta la vista en tres títulos más. Sigue vivo el sueño de conquistar un póker inédito en el fútbol inglés, pese al empate ante el Tottenham.
Superado el compromiso frente al Villarreal, la Champions League queda aparcada hasta el 28 de mayo. Será entonces cuando el Liverpool trate de devolver el golpe que el Real Madrid le asestó en 2018, ganando en la final de Kiev por 3-1 con una temprana lesión de Salah. "Fue un día triste para todos nosotros, creo que ha llegado la hora de la revancha", dijo el egipcio cuando se conoció el cartel de la final de París.
Antes de saltar al césped de Saint-Denis, en Anfield esperan haber conquistado dos títulos más. Este martes retoman el mano a mano que protagonizan con el Manchester City por la Premier League. Un punto les separa al frente de la clasificación. Por la calidad de los equipos y por la poca distancia que hay entre ellos, se prevé una lucha intensa hasta la última jornada. Quedan tres. Y tres son los puntos que los separan. Los de Klopp visitarán al Aston Villa el martes y el próximo martes antes de cerrar el curso liguero en casa frente al Wolverhampton Wanderers.
El Liverpool ya le ha ganado un pulso al City en el presente curso. El pasado 18 de abril resolvió la semifinal de la FA Cup con una actuación vibrante en el primer tiempo. Konaté abrió el marcador y Mané resolvió la eliminatoria antes del descanso. Los celestes maquillaron el resultado a última hora. Con el 2-3, los scousers se aseguraron otra visita a Wembley. La del próximo sábado 14 de mayo. Cuando se disputen con el Chelsea la competición de clubes más antigua de la historia.
Los de Anfield llegan en buena forma a este tramo final. No pierden desde hace dos meses y Firmino es la única baja que arrastran. Aunque el brasileño regresó a los entrenamientos y podría hacerlo pronto a la competición. No lo han echado demasiado en falta. Diogo Jota y Luis Díaz mantienen viva la amenaza ofensiva de un equipo que aspira a todo. Una aspiración que podrían venir bien a un Real Madrid que ya ha hecho los deberes en el plano doméstico. Sin opción en copa, pero campeón ya de Liga, los de Ancelotti preparan ya la final continental. Les vendrá bien que su oponente en dicha cita, siga batallando por otros menesteres con Chelsea y City. O quizá no. Quizá mantener esta mentalidad competitiva ayude a los ingleses a estar más enchufados en París. Sea como sea, el Liverpool no tiene descanso. No por ahora.