VILLARREAL 1- BAYERN 0 / El Villarreal deja escapar vivo al gigante Bayern Munich

Un gol de Danjuma da la ventaja al Submarino de cara a la vuelta aunque Gerard, en tres ocasiones, y Pedraza pudieron aumentar la renta. El VAR anuló un gol a Coquelin.

Julián Burgos

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El Bayern, sí el Bayern de Munich también cayó en la lona ante la versión Champions del Villarreal. La noche pasará a la historia en el pueblo castellonense. Lo contarán los abuelos a los nietos dentro de muchos años. Banderas amarillas al viento. Y un sólo grito de cara a la vuelta: “¡Sí, se puede!”. En Munich será otra historia. Pero en La Cerámica el que se llevó por delante al todopoderoso equipo muniqués fue el Villarreal.

Un gol de Danjuma fue la renta que se lleva el Villarreal al Allianz. Eso y la sensación de haber sido mejor que los de Nagelsmann. Como también lo fueron mejores que la Juve. De hecho, el Bayern se escapó vivo de Vila-real. Gerard, en tres ocasiones, y Pedraza tuvieron el segundo. Incluso el VAR le anuló un gol a Coquelin. Los de Emery supieron contener al Bayern y salir con sentido cuando así lo requería la jugada. Con un Lo Celso enorme. Con dos pulmones como Coquelin y Capoue. Y con una defensa granítica que hicieron parecer aprendices a Müller y Lewandowski.

El plan le salió a Emery tal y como había cavilado en sus noches de insomnio. El Villarreal marcó en la primera que llegó al área. Tras una jugada trenzada que partió de Gerard, que estaba en todos lados, centró Lo Celso y remató a la red Danjuma, después de un remate en semifallo de Parejo. La Cerámica estalló. El primer golpe de la eliminatoria era amarillo.

El técnico vasco había sorprendido con un trivote con Coquelin en el once, sacrificando a Yeremy. Y le salió de perlas. El francés equilibraba el equipo cuando el Bayern apretaba. Y ayudó mucho en la salida ante la presión del bloque de Nagelsmann. Esto le permitió plantear unas transiciones que metían el miedo en el cuerpo a la defensa bávara. Lucas no podía nunca con Gerard. Y desde ahí fluía el ataque.

El Bayern parecía sorprendido. El autoproclamado”favorito” apenas creaba nada sólido. El Villarreal, bien ordenado, con unos defensas concentrados y sin apenas dejar huecos le estaba complicando mucho la vida. Y cuando salía al ataque mordía. Así, tras un aviso de Capoue llegó el gol de Coquelin que Taylor dio como bueno y el VAR anuló. El frances estaba en fuera de juego por dos números de pie. Imperceptible a la vista, implacable para el VAR. Los bávaros respiraban. Hubiera sido muy duro para ellos irse al descanso con un 2-0.

Se esperaba otro Bayern tras el paso por los vestuarios. Más aún cuando Müller no llegó por poco a embocar un servicio de Gnabry. Un espejismo. El Villarreal se recuperó del susto y volvió a coger por las solapas al gigante teutón. Pero le dejó vivo en varias ocasiones. Primero Gerard mandó un latigazo al palo. Sonó el impacto en la madera en todo el estadio antes del Uyyy. Después Upamecano salvó in extremis un disparo de Gerard tras una gran jugada por la izquierda de Estupiñán y Coquelin. Y por último, un disparo de Gerard, tras una gambada de Neuer, desde el centro del campo a puerta vacía. Tres clarísimas.

El Bayern se vio fuera. Ni se creía cómo aún estaba con vida. Las entradas de Sané y Goretzka le dieron otra cara al equipo bávaro y Davies estuvo cerca del empate pero Rulli se lo negó. La movilidad de Coman empezó a hacer daño y el Villarreal empezó a recular. Las arrancadas de Lo Celso le daban algo de aire pero ya era casi más cuestión de resistir. Y así lo hizo. Incluso Pedraza pudo rematar con el segundo tras el enésimo jugadón de Lo Celso. En Munich están las semis.