Red Bull desafía a Ferrari
Los de Milton Keynes citan a la Scuderia para otra batalla rueda a rueda como la que vivieron Verstappen y Leclerc en la reanudación de Australia.
Qué habría pasado en Australia entre el Red Bull y el Ferrari es la única incógnita que ha quedado por resolver, ya que la victoria de Leclerc en la cita inaugural de Bahréin fue incontestable. Pero es ante la duda, donde entran en escena los de Milton Keynes para desafíar a la escudería de Maranello en una nueva batalla como la que disputaron el monegasco y el vigente campeón durante los primeros compases de la carrera en Albert Park.
Lo han hecho a través de una publicación en las redes sociales, con un mensaje contundente desde la cuenta de Red Bull que acompaña a la lucha rueda a rueda que mantuvieron Charles y Mad Max en el último gran premio disputado: "Tercera ronda. ¿Más de lo mismo en Imola, Ferrari?". No ha sido necesario adentrarse demasiado en la temporada para saber que ambas escuderías se postulan como las grandes favoritas al título en este 2022 y parece que ya han empezado la batalla también fuera del asfalto.
En la citada por la escudería energética, curiosamente sale airoso un Leclerc que parte con cierta ventaja junto a un Ferrari, que de momento se parece mucho al coche ideal en este cambio de normativas. El F1-75 no acusa problemas de fiabilidad, ha exhibido el mejor nivel del monegasco sobre el asfalto y además, ni siquiera sufre en términos de potencia como sucedía antaño con respecto al monoplaza de Milton Keynes.
Ahora la escudería energética tiene que buscar en pequeños resquicios algo de ventaja con lo que lidiar su diferencia con el Ferrari y aunque el Mundial desembarca este fin de semana en casa de la Scuderia para la cuarta cita de la temporada que se celebrará en Ímola, escenario en el que los de Maranello quieren regresar a la senda del triunfo después de 16 años (la última victoria data de 2006 con Michael Schumacher), desde Red Bull no se achantan y esperan volver a luchar por una victoria que hace tan solo un año, cayó del lado del neerlandés.
