Lucas agua la Feria al Sevilla

El gallego igualó con una magistral falta un partido en el que el Cádiz mereció al menos ese empate. Los nervionenses se complican el 2º lugar y los puestos Champions.

José A. Espina
As
La Feria comienza aguada para el Sevilla, que se complica el segundo puesto y hasta la clasificación para la próxima Champions después de sumar un empate inesperado, pero que un Cádiz heroico y arropado por centenares de aficionados amarillos fue capaz de merecer y cosechar en su lucha por la salvación. Paradójicamente, a pesar del gran partido que cuajó y del punto en Nervión, el equipo de Sergio podría entrar en puestos de descenso esta misma jornada si el Granada derrota al Celta de Vigo el domingo en Los Cármenes.

Y eso que había salido mandón el conjunto local. Abrió muy pronto la lata En-Nesyri, que ponía fin de cabeza, a la salida de un córner, a nada menos que seis meses sin marcar de blanquirrojo (1-0, 6'). Pero prácticamente se trató del efecto de una botella de champán, se le fueron muy pronto las burbujas al Sevilla. No tardó el Cádiz en subírsele a las barbas al equipo de Lopetegui, incapaz desde el minuto 20 de quitarse el dominio del equipo amarillo, ya casi hasta el final del partido. Todavía la primera mitad, asediado por las internadas de Iván Alejo y Rubén Sobrino, Bono sacaba una mano imposible a Lucas Pérez para evitar el empate cuando los gaditanos acumulaban muchísimas papeletas para al menos haber igualado el choque.

Algo que conseguiría el propio Lucas con una genialidad en la segunda mitad, en medio de los aplausos de su afición y de una grada sevillista que mayoritariamente silbó a su equipo, impotente ante la pujanza visitante. Un fallo de Jordán en la salida del balón y la posterior falta del propio jugador catalán la mandaba el delantero gallego a la escuadra, sin tópicos y con la máxima precisión, de la portería nervionense, imposible para Bono. Lopetegui había hecho algunos cambios y volvió a agitar lo que pudo el banquillo pero su equipo casi no inquietó a Ledesma salvo otra vez En-Nesyri, pero esta vez torpe cuando en otro saque de esquina se trabó en un remate que le salió flojo y mal.

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