Jesús anota cuatro para recordarle a Guardiola su talento
DE chivo expiatorio a chivo expiatorio en menos de 24 horas... pero con un apellido como ese, las resurrecciones son parte del curso.
El sábado por la mañana, Gabriel Jesús volvió a ser señalado por algunos como el extraño cuando Erling Haaland llegue al Etihad en el verano.
Sin embargo, al final de la tarde, Jesús era el nombre en boca de todos por las razones correctas, después de un gran espectáculo de cuatro estrellas para enviar al Manchester City de vuelta a la cima.
Tres goles de Prem hasta ayer, más del doble en una tarde. No está mal para un tipo que ahora pasa su tiempo como extremo derecho, en lugar de delantero centro.
Con solo una temporada más en su contrato, existe, por supuesto, el peligro de que Jesús aún pueda decidir cortar y correr gratis cuando se agote. Arsenal, por su parte, son grandes fans.
Y el verano no sería verano sin los informes de que Jesús sería el que daría paso cuando City trajera su último nombre de marquesina.
Así que pelear contra Watford probablemente tampoco cambie las cosas esta vez. Sin embargo, todo eso es para otro momento.
Por ahora, todo lo que le preocupa al City es abrir esa ventaja de cuatro puntos sobre el Liverpool, y aumentar la temperatura un poco antes del derbi de Merseyside de esta tarde.
Ciertamente significa que no pueden darse el lujo de cometer un desliz en Anfield... y había muy poco peligro de eso aquí, contra un equipo al que el City ha derrotado 15 veces seguidas.
Solo tomó tres minutos y 38 segundos poner sus narices al frente esta vez, cortesía de Jesús primero y cualquier pensamiento de que sería un concurso terminó entonces.
El centro de Joao Cancelo desde la derecha voló hasta Oleks Zinchenko más allá del segundo palo, y cuando lo remató en el área, Jesús sacó un pie para clavarlo.
Ben Foster superó un disparo de Cancelo y empujó otro del goleador del City, y los pensamientos parpadearon hacia ese 8-0 escondido en la última visita de los Hornets, en 2019.
Y cuando Jesús dobló a la mitad de la mitad, parecía que necesitaríamos más de dos manos para la cuenta final.
Nuevamente, ese vino de una cruz, pero mientras que el primero simplemente fue conducido a territorio enemigo, este fue un lanzamiento guiado por láser de Kevin De Bruyne y nuevamente Jesús no podía fallar.
Se acabó el juego, eso pensamos. Aunque un contraataque de Watford justo antes del segundo del City, que terminó con un excelente dardo hacia atrás y una entrada deslizante de Zinchenko, debería haber asegurado que no se quedara dormido.
Sin embargo, no fue así, porque justo antes de la media hora, la ventaja se redujo a la mitad, con un gol que hizo que Pep Guardiola arrojara furiosamente una botella de agua al suelo con disgusto.
Hassane Kamara empezó la jugada a mitad de camino, y cuando nadie siguió su carrera y recibió un pase de vuelta de Emmanuel Dennis antes de anotar en el córner, el jefe del City estaba furioso.
Pero ya sabes lo que dicen sobre pellizcar la cola del tigre. Bueno, Watford descubrió el peligro con la más devastadora de las retribuciones.
Irónicamente, el City restauró el colchón de dos goles con la mayoría de sus fanáticos aullando para que pusieran el balón fuera de juego... y la mitad del equipo también.
De Bruyne estaba agarrándose el tobillo en agonía a 20 yardas de la portería, cortesía de un fuerte desafío de Moussa Sissoko, cuando Jesús mantuvo viva la jugada por la banda derecha.
Ignoró el punto de Raheem Sterling para apagarlo, en lugar de eso, le dio un golpe adentro a Rodri, y el tiro del español le habría cortado los dedos a Foster si lo hubiera tocado en el camino a la red.
Esta vez realmente todo había terminado. Esta vez no habría cabeceos por parte de los campeones reinantes. Y esta vez Watford realmente se vino abajo.
Menos de 15 segundos después del descanso, Jesús había entrado a toda velocidad en el área, y después de que Kamara casi lo hiciera caer, la bota izquierda extendida de Foster lo hizo.
El brasileño se levantó para enviar a Foster por el camino equivocado desde el punto y selló su hat-trick en un total combinado de alrededor de 20 yardas.
Para algunos equipos que se enfrentan a unas seis semanas tan agitadas como el City, eso habría sido suficiente para poner el taco en el estante y pasear por el resto del juego.
Por otra parte, ya nos han demostrado muchas veces que no son un equipo cualquiera, y Jesús estuvo rápidamente en el centro de todo nuevamente con un cuarto.
Intercambió pases con De Bruyne y se convirtió en el primer jugador de Prem en anotar cuatro en un juego desde Son Heung-Min de Tottenham contra Southampton hace dos años.
Con 37 minutos para el final, la mayor sorpresa fue que él y el City no sumaron más, ya que finalmente quitaron un poco el pie del acelerador.
A ti Jurgen….
