Zlatan Ibrahimovic en octubre cumplirá 41 años, pero sus ganas de seguir jugando están intactas. Lo dejó claro ayer, con un video en sus redes sociales disparando balones y este mensaje: "Yo decido cuándo parar, exactamente como yo decido que el balón amarillo te va a golpear".
Los problemas físicos, sin embargo, le dejaron al sueco muy poco tiempo para expresar su talento en el verde. En la Serie A fue titular apenas 11 veces en 33 jornadas, aunque en sus 937 minutos disputados supo ser decisivo con dos asistencias y ocho goles. El último fue ante el Venecia, hace más de tres meses, gracias al que sumó 23 años seguidos con goles en las ligas top de Europa, algo que solo supieron lograr Totti y Giggs. Según 'La Gazzetta dello Sport', pronto Ibra se verá con los directivos Maldini y Massara, que, gracias a su gran trabajo, serán confirmados por los nuevos dueños de la entidad.
Al fondo Investcorp, que cerrará al adquisición del equipo en las próximas semanas por 1.100 millones, la idea de seguir contando con el punta le gusta, pero con condiciones muy distintas a las actuales. Ibrahimovic cobra 7 millones netos hasta junio, mientras que su nuevo contrato llegaría, como mucho, a un tercio de esta cifra. El ex del Barça no priorizará el dinero para el último año de su carrera, así que un acuerdo parece posible. Mientras, el delantero se prepara para regresar y vivir como protagonista las últimas cinco jornadas de Serie A, en la que el Milan tendrá que defender su liderato para celebrar el scudetto, algo que le falta desde 2011. El domingo, en la complicada visita a la Lazio, Pioli podrá volver a contar con él.